Luego de 17 años de servicio es despedida de PDVSA en el 2003 a pesar de su suspensión médica como consecuencia de dos diagnósticos de enfermedades graves, logra su reenganche, hasta obtener la Discapacidad Total y Permanente por parte del Instituto Venezolano de Seguros Sociales (IVSS), y es cuando PDVSA decide jubilarle manteniendo los beneficios de salud. “Estando jubilada, en el 2012 me diagnostican la hipertensión pulmonar severa, con la crisis me recomendaron venir a evaluarme en Houston y en el 2014 logré venir, han probado 10 tratamientos pero ninguno daba resultado” nos explica Maribel.
En 1989 fue diagnosticada con Epilepsia tipo Gran Mal, en 2002 de Esclerosis Múltiple tipo Brotes y Remisiones, y en el 2012 con Hipertensión Arterial Pulmonar Primaria Idiopática, atribuida a una Pulmonary Veno-Occlusive Disease (PVOD) que ha derivado en insuficiencia cardíaca. “Yo se que no soy el caso más crítico, pero soy un caso diferente debido a la coincidencia de todas estas enfermedades raras…Todas estas patologías no me desaniman, sino que me hacen luchar para continuar con vida cada día, lo que no es una tarea fácil” En el 2017 fue evaluada para un trasplante de pulmón, pero fue rechazada debido a sus otros diagnósticos.
A raíz de que el gobierno de los Estados Unidos, emitió órdenes ejecutivas para bloquear los activos y cuentas de PDVSA en el país, todos los recursos destinados a los seguros médicos, medicamentos, hospedaje y alimentación de Maribel fueron suspendidos. “Yo soy una Venezolana que si no se toma sus medicinas puede morir, que necesita estar cerca de los hospitales, visitas al médico y chequeos frecuentes, nutrición especial y terapias, entre otras necesidades médicas”
“Un niño que tiene desnutrición o paciente con cáncer no son menos importantes, no importa si están Venezuela o en el exterior. Es un momento muy coyuntural dentro de la situación país, se que hay muchas prioridades por encima de mi. Por eso yo me he movido, he conseguido algunas medicinas donadas, he enviado cartas a congresistas, senadores, OEA, OFAC, personal ejecutivo de CITGO, presidenta de CITGO Luisa Castillo, a mucha gente, y todos tienen la disposición de ayudar pero no se ha concretado nada.” Nos enfatiza.
Como resultado de sus esfuerzos, la OFAC se comunicó directamente con Maribel para explicar el simple procedimiento administrativo con el cual se ejecutaría una licencia que permitirá a PDVSA acceder a los fondos necesarios para atender sus necesidades, Así como también explicaron, que la empresa que se encuentra sancionada en PDVSA y está a disposición de CITGO la posibilidad de incluirla en su seguro médico para recuperar sus beneficios. “Es una cuestión administrativa, un plumazo, que alguien de una orden.” Comenta Maribel.
Maribel nos presenta su situación en cifras:
- 29 medicinas, vitaminas y suministros médicos.
- $37,804.86 mensuales en medicamentos.
- 3 enfermedades que han desencadenado en 21 condiciones médicas, en su mayoría graves.
- 5 alergias a medicamentos.
- 21 hospitalizaciones, salas de emergencia, cuidados intensivos, 6 de ellas muy graves (de muerte).
- 8 cateterismos en su mayoría de la parte derecha del corazón.
- 10 bacterias, virus o infecciones
A pesar de su condición de salud, se ha mantenido activa laboralmente, ha vendido sus activos y buscado siempre las vías para reducir el monto de la ayuda que recibía de PDVSA, nos dice “Si es la hora de apretarse los pantalones todos los venezolanos ¿por qué no apretármelos yo? yo no tengo ningún problema.”
Maribel es una mujer luchadora y optimista, no se desalienta y está determinada a seguir con vida. Pero debido a la complejidad de su situación médica, el equilibrio que la mantiene con vida es muy frágil. Ha iniciado una campaña de GoFundMe para cubrir parcialmente sus gastos médicos, alojamiento y comida, pero su vida depende de la voluntad de algún ejecutivo en CITGO para devolverle sus derechos.