Por: Roger Rivero
El Hyundai Santa Fe está mucho más “relajado” en su nueva posición, como un SUV de tamaño mediano. Por años lo obligaron a competir en una división qu
e no le correspondía, pero desde el nacimiento del Hyundai Palisade, el Santa Fe ha perdido una fila de asientos, para convertirse en un amplio y bien equipado utilitario mediano, capaz de mover a una familia de cinco miembros con excelente comodidad.
Desde afuera y por dentro
En comparación con el modelo anterior, el nuevo Santa Fe es más límpido en diseño y a la vez elegante. Toma prestado el sistema de faros delanteros de dos niveles del resto de la alineación es más cuadrado, más erguido y de aspecto más resistente que su predecesor. La parrilla distintiva de la marca se ve ahora mejor, e incluso los modelos básicos, lucen revestimientos de carrocería de cromo y plástico como los más caros en la alineación.
El interior es de alta calidad, con costuras en contraste, prácticos compartimentos de almacenamiento y materiales de buen rango. El diseño evidencia formas curvas, con un salpicadero que envuelve al conductor y el pasajero separadamente. En el centro la pantalla del info-entretenimiento sin estar integrada con elegancia, tampoco resulta discordante.
Perder una fila de asientos le ha venido muy bien al 2020 Santa Fe. No solo por la aumentada capacidad de carga, si no por el excelente uso que han hecho del espacio liberado bajo el piso. Allí encontré varios “cajoncitos” muy prácticos para almacenar objetos fuera de la vista, o para colocar las bolsas de supermercado luego de las compras, sin temor a que rueden al rebasar la primera esquina.
Hyundai ha utilizado buenos materiales de aislamiento, pues el paseo del Santa Fe es bien silencioso.
Equipamiento y seguridad
Las características estándar de asistencia al conductor incluyen control de crucero adaptativo, frenado automático de emergencia, advertencia de colisión frontal con detección de peatones, monitoreo de somnolencia del conductor y asistencia de mantenimiento de carril. Una cámara retrovisora también viene estándar en todos los modelos.
Las características de seguridad activa disponibles incluyen sensores de estacionamiento traseros, una pantalla de visualización frontal, monitoreo de punto ciego y alerta de tráfico cruzado trasero, así como una cámara de estacionamiento con vista envolvente en 360 grados. También están disponibles Safe Exit Assist, que monitorea el tráfico trasero antes de que los pasajeros salgan del vehículo, y Blind View Monitor, que muestra una imagen en tiempo real de los puntos ciegos del SUV en la pantalla de instrumentos del conductor, cuando este activa una señal de giro en cualquiera de los dos flancos.
En la carretera
Hay dos opciones de motor para el 2020 Santa Fe. Un 4 cilindros de 2.4 capaz de producir 185 caballos de potencia es la opción básica, y recomendada para aquellos que sean poco exigentes. Le transportará sin sobresaltos dentro de la ciudad, pero no le demande mucho si necesita incorporarse a la autopista con rapidez o para rebasar otro auto en la carretera.
La otra opción sería también un 4 cilindros, pero este turbo alimentado con un incremento de 50 caballos, para un total de 235. La diferencia de poder es ostensible, y, por tanto, está seria nuestra recomendación. Cualquiera de las dos motorizaciones va acopladas a una transmisión automática de 8 velocidades, y puede elegir AWD o tracción en todas las ruedas en cualquier combinación.
El 2020 Hyundai Santa Fe viene en tres versiones: SE, SEL y Limited como el de nuestra prueba. Creemos que la versión intermedia, SEL, es la mejor opción para la mayoría de los compradores. Viene con varias características adicionales de comodidad y asistencia al conductor, y ofrece dos paquetes de opciones que no están disponibles en el modelo SE base. También con el SEL puede optar por el motor turbo alimentado, que es una mejora que vale la pena, pues como comentamos antes, el motor base no impresiona en la mayoría de las situaciones de manejo.