La Unión Europea (UE) expresó su descontento a la investidura del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Según la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, las elecciones presidenciales celebradas el pasado mayo en Venezuela no fueron ni libres ni justas, por lo que sus resultados carecen de credibilidad.
Asimismo, lamentó que Venezuela ignorara el llamamiento para unas elecciones presidenciales bajo las normas democráticas internacionalmente reconocidas y el orden constitucional venezolano.
Para la Unión Europea, tener a Maduro ejerciendo un segundo mandato hace más difícil la situación política, económica y social, además de aumentar la crisis y la estabilidad de la región.