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Austin, Texas — El gobernador republicano Greg Abbott firmó este 3 de mayo la Ley SB 2, que convierte a Texas en el estado número 30 de EE.UU. en implementar un programa de cuentas de ahorro para educación (ESA, por sus siglas en inglés), usando dinero público para financiar colegios privados. El plan, que comenzará en el ciclo escolar 2026-27, promete “empoderar a los padres” pero genera divisiones por su impacto en el sistema educativo tradicional.
¿Qué ofrece la SB 2?
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$1,000 millones asignados inicialmente para becas.
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$10,330 anuales por estudiante (85% del fondo que reciben las escuelas públicas).
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Hasta 30,000 para alumnos con discapacidades y 2,000 para homeschooling.
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Fondos administrados por el estado (no entregados directamente a familias) para evitar fraudes.
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Prioridad para familias de bajos ingresos (hasta $160,000 anuales para familia de 4).
La polémica
Mientras Abbott celebró “la mayor expansión de elección escolar en EE.UU.”, críticos como la representante demócrata Ana-María Rodríguez Ramos advirtieron: “Es un engaño para beneficiar a ricos. Las escuelas privadas no están obligadas a aceptar a todos, y los costos reales superarán los subsidios”.
Datos clave:
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La colegiatura privada promedio en Texas ronda los 11,000−15,000 anuales (según la Texas Private Schools Association).
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Escuelas públicas perderán fondos por cada alumno que migre al programa, según análisis legislativos.
¿Y las escuelas públicas?
El gobierno prometió aumentar salarios docentes y financiamiento escolar, pero proyectos paralelos están estancados en la legislatura. “No es ‘ellos contra nosotros’; queremos lo mejor para todos”, declaró el vicegobernador Dan Patrick.
Contexto: La SB 2 se aprobó tras años de bloqueos por republicanos rurales y demócratas. Su avance fue posible tras cambios en la Cámara Baja, donde aumentaron los pro-ESA.
¿Seguirá el debate?
Demócratas como Kendall Scudder (presidente del partido en Texas) prometieron convertir el tema en bandera electoral para 2026: “Las zonas rurales saldrán perdiendo”. Mientras, Abbott insiste en que Texas competirá por tener “el mejor sistema educativo del país”.