
Fotografía de archivo, tomada el pasado 2 de febrero, de la cantante estadounidense Taylor Swift, en Los Ángeles (CA, EE.UU.). EFE/Allison Dinner
(EFE).- La estrella del pop Taylor Swift ya no será citada como testigo en la batalla legal entre los actores Blake Lively y Justin Baldoni por los conflictos derivados de su película ‘It ends with us’, que se dirimirán en un juicio que empezará el 9 de marzo de 2026.
Baldoni, quien dirigió y coprotagonizó la película junto a Lively, retiró este jueves la documentación que solicitaba la información como testigo de la cantante, dada su amistad con la actriz de Hollywood.
Un portavoz de Lively confirmó la noticia a varios medios y declaró que están “contentos” de que el equipo legal de Baldoni haya “retirado sus citaciones de acoso a Taylor Swift y su bufete de abogados”.
“Apoyamos los esfuerzos del equipo de Taylor para anular estas citaciones inapropiadas dirigidas a su abogado y seguiremos defendiendo a cualquier tercero que sea injustamente acosado o amenazado en el proceso”, agregó el portavoz.
El vocero también insistió en que el equipo de Baldoni ha tratado de poner en el punto de mira a la famosa cantante desde el primer momento, aprovechándose de su fama.
Swift fue citada a principios de mes, pero su equipo enfatizó entonces que no tenía una conexión cercana con la cinta puesto que “nunca pisó el set de esta película, no participó en ningún casting ni en decisiones creativas, no compuso la banda sonora, nunca vio una edición ni tomó notas sobre la película, ni siquiera vio ‘It Ends With Us’ hasta semanas después de su estreno”.
Además, miembros del equipo de la cantante agregaron que la única conexión con la artista es la licencia para el uso de una de sus canciones en el largometraje, igual que hicieron otros 19 artistas.
Por otro lado, la semana pasada se produjeron varias acusaciones por parte del equipo de Baldoni con una carta dirigida al juez en el que se alegaba que Lively había amenazado con publicar mensajes privados con la cantante, si esta no la apoyaba públicamente. Sin embargo, el juez la retiró del expediente al considerarla “indebida” e “irrelevante” para el caso.
La batalla legal entre Lively y Baldoni se remonta a finales de 2024, cuando la actriz denunció al actor y director de la cinta por acoso sexual y por comportamientos inadecuados durante el rodaje.
El conflicto, que incluye un reclamo de 400 millones de dólares, no ha hecho más que crecer. Lively acusó posteriormente a Baldoni y a su productora, Wayfarer, de ejecutar un plan para dañar su reputación tras la denuncia de acoso sexual y a su vez estos demandaron a la actriz y a su esposo, Ryan Reynolds, junto con su publicista, por intentar “destruir” su carrera.