El presidente Daniel Ortega declaró que no recibiría a los grupos intervencionistas de la Organización de Estados Americanos, en referencia al grupo de trabajo cuya visita tenía como objetivo colaborar para la reactivación del diálogo nacional.
Ortega manifestó que no se podían aceptar las amenazas que les mandan, refiriéndose al hecho de que aquellos grupos se sienten con la potestad de andar ocupando territorios para luego adueñarse de ellos.
Agregó que estos grupos en Europa opinan acerca de la situación en Venezuela y Nicaragua, mayormente sobre los presos políticos, sin aceptar que quienes están detenidos y juzgados, lo están por delitos comunes.
Aclaró que quienes están detenidos no lo están por hablar en contra del gobierno o lanzar amenazas contra el mismo, sino por cometer un crimen o delito.