
La físcalía general de México, desactivó una red que vendía a sobreprecio alimentos de baja calidad al gobierno de Venezuela.
La procaduría, informó que dentro de esta red participaban empresarios mexicanos y venezolanos. El objetivo de ella, era atender la crisis de abasto que existe dentro de Venezuela.
Para evitar un juicio, los implicados empresarios mexicanos acordaron entregar una indemnización de US$3 millones, cifra que se le otorgará a la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Dicha red ejecutaba su respectiva distribución a través del sistema CLAP o Comité Local de Abastecimiento y Producción venezolano, donde el gobierno vende a un precio subsidiado cajas con alimentos básicos con los que subsisten muchos venezolanos en el medio de la crisis e hiperinflación.
Por el momento, se desconoce la cantidad de despensas enviadas a Venezuela y el tiempo en que operó la red que fue desactivada.