La reina Paola de Bélgica, de 81 años, madre del rey Felipe, sufrió este martes un derrame cerebral en horas de la noche en Venecia, Italia, y fue trasladada urgentemente a su país, según informaron los medios belgas e italianos.
“Debido a un problema de salud, Su Majestad la Reina Paola será repatriada a Bélgica durante el día para seguir exámenes médicos”, así lo expresó la Casa Real por medio de un comunicado, sin mencionar el derrame.
La reina Paola, de origen italiano, es la esposa del rey Alberto II, quien reinó de 1993 a 2013, cuando abdicó en favor de su hijo Felipe.
Según la cadena de radio y televisión belga RTBF, Paola tiene que ser “repatriada urgentemente en avión” hacia Bélgica, a la base militar de Melsbroek cerca de Bruselas, este miércoles en horas de la tarde.
En estos últimos años, la reina Paola ya tuvo que superar varios problemas de salud. En septiembre 2015, tuvo que mantener un “periodo de reposo total” debido a una arritmia cardíaca.
En febrero de 2017, se fracturó el cuello del fémur en una caída, menos de dos meses después de haber sufrido una “fractura vertebral”, según la Casa Real.
Nacida como princesa Paola Ruffo di Calabria, el 11 de septiembre de 1937, en Forte dei Marmi, en Italia, Paola es la más joven de los siete hijos del príncipe Fulco Ruffo di Calabria, héroe de aviación de la Primera Guerra Mundial, y la condesa Luisa Gazelli.
La futura reina pasó toda su juventud en Roma, donde conoció, a los 21 años, al príncipe Alberto en una recepción organizada en la embajada de Bélgica al margen de las ceremonias de entronización del papa Juan XXIII.
Fuente: EV Houston Newspaper / AFP