Foto: EFE/AARON M. SPRECHER/Archivo
La mayor parte de los restos del cohete chino Larga Marcha 5B se desintegraron hoy al colisionar con la atmósfera y cayeron en el océano Índico, poniendo fin a las especulaciones sobre si su regreso a la Tierra podía causar daños.
Algunos expertos consideraron los restos del Larga Marcha 5B -utilizado para lanzar al espacio uno de los módulos de la futura estación espacial china- como uno de los mayores trozos de escombros en regresar a la Tierra, y de ahí su vigilancia continuada.
También científicos estadounidenses criticaron que el programa especial chino permitiera el reingreso incontrolado de un cohete tan grande, y hoy el administrador de la NASA, Bill Nelson, reprendió al país asiático por “no estar cumpliendo con los estándares de responsabilidad respecto a sus desechos espaciales”.
“Los países con capacidades espaciales deben minimizar los riesgos para las personas y las propiedades de la reentrada de objetos espaciales, así como maximizar la transparencia sobre esas operaciones”, señaló hoy Nelson en un comunicado.
Agregó que “es fundamental que China actúe de manera responsable y transparente para garantizar la seguridad, la estabilidad y la sostenibilidad a largo plazo de las actividades en el espacio exterior”.
Con información de EFE…