Foto: EFE/Giorgio Viera
(EFE).- Por cuarto año consecutivo, la población de personas sin hogar en Estados Unidos aumentó y la cifra se acercó a 600.000, de los cuales el 23 % son hispanos, según un informe oficial que no alcanzó a reflejar el impacto de la pandemia en el problema de la falta de vivienda .
De acuerdo con el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD), entre los años 2019 y 2020 la población de personas desamparadas aumentó más de un 2 % y en “una sola noche de 2020, aproximadamente 580.000 personas estaban experimentando la falta de vivienda”.
El incremento del 2,2 %, que equivale a 12.751 de desamparados más respecto al año anterior, abarca un aumento del 7 % entre quienes permanecen al aire libre, lo que eclipsa “con creces la modesta disminución (0,6 %) de las personas que se quedaron en lugares protegidos”, señala el informe del HUD.
Durante 2020, el 61 % de los “sin techo” se alojaba en lugares protegidos, refugios de emergencia o programas de vivienda de transición, mientras que el 39 % se encontraba en “lugares sin refugio, como en la calle, en edificios abandonados o en otros lugares no aptos para la habitación humana”, agrega el documento.
En un video que acompaña la publicación del reporte, la secretaria (ministra) de HUD, Marcia Fudge, calificó las cifras de “devastadoras” y dijo que la nación tiene la “responsabilidad moral de acabar con la falta de vivienda”.
“Sabemos que la pandemia solo ha empeorado la crisis de las personas sin hogar”, agregó.
La contabilidad para este reporte se hizo en enero de 2020, es decir cuando la pandemia de la covid-19 no había estallado y producido un efecto económico negativo en los hogares del país.