La líder opositora peruana Keiko Fujimori pasará 36 meses en prisión preventiva mientras se la investiga por presunto lavado de activos y recibir aportes ilegales de la constructora brasileña Odebrecht, decidió un juez el miércoles, lo que puede complicar la carrera política de la dos veces candidata presidencial.
El juez Richard Concepción concluyó que existe un peligro de fuga y de que Fujimori obstaculice las pesquisas, por lo que resolvió privarla de su libertad a la espera de que el fiscal presente cargos formales y un tribunal defina si inicia un proceso judicial por el caso.
“Se impone mandato de prisión preventiva contra la investigada Keiko Fujimori por el plazo de 36 meses por los delitos de lavado de activos”, dijo el juez en la audiencia. “La investigada tiene todos los arraigos pero eso no garantiza que vaya a eludir a la justicia”, dijo en el fundamento del fallo.
La defensa de Fujimori anunció que apelará la resolución.
Tras el fallo la líder opositora, que parecía contener las lágrimas, fue consolada con un abrazo por su esposo, el estadounidense Mark Vito, antes de salir de la sala custodiada por policías judiciales.
Keiko Fujimori, de 43 años, sufrió otro golpe a inicios de mes cuando fue anulado un indulto humanitario para su padre, el expresidente Alberto Fujimori, quien deberá cumplir prisión por abusos a los derechos humanos.
La decisión judicial reduce sus posibilidades de poder postularse a la presidencia por tercera vez en las elecciones de 2021 y dejaría espacio para que políticos nuevos busquen el poder en el país.
“El fallo confirma la arbitrariedad e injusticia”, dijo una de las legisladoras del partido Fuerza Popular, Úrsula Letona, a un canal de televisión local. “No hay ninguna clase de obstaculización como prueba, esperamos que se pueda corregir esta decisión arbitraria y desproporcionada”, agregó.
Poco después del fallo, imágenes emitidas por televisión mostraron a Fujimori esposada y siendo llevada a uno de los centros de detención de la sede del Poder Judicial, antes de ser enviada a una prisión para mujeres.
“AquÍ no existe imparcialidad judicial”, dijo la abogada de la política Giuliana Loza. “No hay sustento alguno para la prisión preventiva. Apelaremos la próxima semana”, agregó.
Con Fujimori en prisión preventiva no quedó claro quién dirigirá el poderoso partido de derecha Fuerza Popular, que tiene mayoría en el Congreso unicameral, en medio de fuertes enfrentamientos con el Gobierno del presidente Martín Vizcarra.
La semana pasada, Keiko instó a su partido a buscar “una agenda nacional” junto a otros grupos políticos y al presidente Vizcarra, en un dramático giro.
Con información de Reuters.