Un hombre fue arrestado en Arabia Saudita luego de difundir un vídeo en el que se lo veía desayunando con una compañera de trabajo en un lugar público y que además saludó a la cámara.
Es importante destacar, que en el país ultraconsevador las mujeres no pueden compartir la mesa con varones solteros, así como tampoco pueden realizar muchas actividades sin estar acompañadas por un tutor masculino. La estricta segregación entre hombres y mujeres se aplica en Arabia Saudita. En los lugares de trabajo y en muchos restaurantes, las mujeres y los hombres que no son parientes cercanos deben sentarse separados el uno del otro.
Según publicó el diario británico The Guardian, las autoridades sauditas arrestaron a un trabajador egipcio por difundir un video al que calificaron como “ofensivo”. Las imágenes de la pareja compartiendo una comida y algunas bromas provocaron la indignación inmediata en las redes sociales.
Sin embargo, el punto que provocó más ira se encuentra al final del video de 30 segundos cuando la mujer, cubierta con el niqab islámico, saluda a cámara, toma el desayuno y parece alimentar al hombre.
Según el comunicado del ministerio de Trabajo y Desarrollo Social saudita, citado por la BBC, el hombre cometió “graves violaciones y ocupó el lugar para sentarse reservado a los ciudadanos sauditas”. Además, el ministerio dijo que el dueño del hotel había sido convocado por no cumplir con las regulaciones gubernamentales que estipulan la segregación de género.
La reacción de los ciudadanos ultraconservadores pone de manifiesto los desafíos que enfrenta el príncipe heredero Mohammed bin Salman que busca modernizar un país inmerso en el conservadurismo. Por el momento, el príncipe puso fin a décadas de prohibición a las mujeres de conducir, ha vuelto a abrir los cines después de 35 años y permitió algunos conciertos de género mixto.
Vídeo cortesía The Guardian