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El gobierno del presidente Biden dio a conocer una nueva medida que beneficiará a aquellos que tienen derecho a solicitar o renovar un permiso de trabajo.
A partir de ahora, los permisos de trabajo serán emitidos por un período de cinco años, en lugar de los dos años anteriores.
Esta actualización aplica para personas admitidas como refugiados, asilados o que tienen suspensión de un proceso de deportación.
El objetivo principal de esta decisión es agilizar el procesamiento y reducir los retrasos asociados. Sin embargo, es importante tener en cuenta que si el estatus de una persona se termina, también se aplicará a sus permisos de trabajo, según explicó USCIS.