
El Departamento de Estado negó las acusaciones hechas por Maduro, quién alegó que un diplomático estadounidense se involucró en un ataque a instalaciones militares en Venezuela.
“Las acusaciones más recientes de Maduro son ridículas y muestran su creciente desesperación”, dijo un portavoz de la entidad.
Recordemos que Maduro acusó al encargado de negocios para la Oficina Externa de EE.UU., James Story, de liderar una compleja trama de conspiraciones y operaciones “terroristas.
Según Maduro, la prueba de la conspiración fue una llamada que Story supuestamente hizo al viceministro para América del Norte, Carlos Ron, para favorecer a la diputada opositora Yanet Fermín, quien era objeto de una acción judicial.
Fermín denunció el fin de semana que agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar allanaron su casa y pretendían arrestarla. Algunos vecinos, acompañados por Guaidó, se aglomeraron en el lugar para rechazar la acción y poco después los agentes se retiraron.
Maduro indicó que a la legisladora, perteneciente al partido Voluntad Popular, la buscaban la Fiscalía y los tribunales porque estaba financiando, coordinando y dirigiendo una conjura sangrienta para atacar cuarteles en Venezuela.
Con información de VOA Noticias… / Andrea González.