Foto: EFE/José Pascual/Archivo
(EFE).- El Senado estatal de Texas (EE.UU.) validó este jueves un proyecto de ley que contiene nuevas restricciones al derecho al voto, pese a la resistencia de una senadora latina que habló durante 15 horas en el pleno de la cámara para intentar impedir su aprobación.
La votación supone un paso más en un extraordinario pulso entre los demócratas y republicanos en Texas respecto a la reforma electoral, que provocó que decenas de legisladores progresistas se fugaran del estado en julio para bloquear la aprobación de esa polémica medida.
Para intentar que la Cámara Alta estatal no sacara adelante el proyecto de ley, la senadora demócrata Carol Alvarado recurrió a una maniobra conocida como “filibusterismo”, que consiste en hablar durante horas en el pleno de una cámara para impedir que el asunto sobre el que se debate pase a votación.
Alvarado empezó a hablar el miércoles por la tarde y no paró hasta las 9 de la mañana del jueves, cuando la mayoría republicana en la Cámara procedió a impulsar la votación sobre el proyecto de ley, que salió adelante por 18 votos contra 11.
“La supresión del voto en cualquier parte es una amenaza para la democracia en todas partes”, denunció una exhausta Alvarado al terminar su discurso.
Durante todo el tiempo que habló en el pleno del Senado, Alvarado tuvo que estar de pie, sin poder sentarse, apoyarse en su mesa, comer, ir al baño o centrar su discurso en temas que no estuvieran relacionados con el proyecto de ley, según las reglas que rigen el “filibusterismo” en Texas.
La senadora reconoció que no lograría impedir que la legislación se acabara votando, pero confió en que su esfuerzo ayudara a “arrojar luz” sobre el riesgo de aprobar medidas que “hacen que sea más difícil votar”.