Una nueva ley que penaliza con hasta 10 años de cárcel a los ciudadanos británicos que vivan en lugares donde se fomenta la actividad terrorista entró este viernes en vigor en el Reino Unido, informó el ministerio de Interior.
La llamada Ley Antiterrorista y de Seguridad de Fronteras de 2019 estipula como delito criminal entrar o permanecer en determinadas áreas conflictivas, aunque el ministro británico de Interior, Sajid Javid, deberá ahora establecer cuáles son esas zonas.
La legislación, no obstante, no tiene efecto retroactivo para penalizar a los británicos que viajaron a Siria para luchar con el Estado Islámico (EI) y después volvieron al Reino Unido.
Si las autoridades británicas establecen que un ciudadano ha entrado y ha permanecido en una zona “designada” puede ser condenado con hasta diez años de prisión, si bien hay excepciones para aquellos que viajen por otras razones, como la labor periodística, a visitar a un pariente o al funeral de un familiar.
La cartera de Interior considera que estas medidas permitirán evitar que los ciudadanos puedan participar en actividades terroristas en conflictos que puedan ocurrir en el futuro.
Se estima que más de 900 ciudadanos del Reino Unido han viajado a Siria para participar en el conflicto, de los que algunos han perdido la vida y otros han vuelto al país.
“Esta nueva ley le otorga a la Policía los poderes que necesita para desbaratar complots terroristas y asegurar que aquellos que quieren lastimarnos afrontan el castigo justo”, señaló Javid.
“Como hemos visto en los terribles atentados en Londres y Manchester de 2017, la amenaza del terrorismo continúa evolucionando y también debe ser nuestra respuesta, y es por ello que estas nuevas medidas han sido introducidas”, agregó Javid en una nota.
En el Reino Unido, hubo cinco atentados terroristas en 2017, cuatro en Londres y uno en Manchester, mientras que la Policía y lo servicios secretos han frustrado 18 complots en los últimos dos años.
Fuente: EFE