Foto: EFE/David Maung
El gobierno de Biden autorizó la finalización del muro fronterizo entre Estados Unidos y México, financiado por Trump, en una zona abierta del sur de Arizona, cerca de Yuma, que se ha convertido en uno de los corredores más transitados para los cruces ilegales.
Biden había prometido durante su campaña el cese de toda futura construcción del muro, pero la administración aceptó más tarde algunas barreras, citando la seguridad como motivo. El Departamento de Seguridad Nacional dijo el jueves que las obras para cerrar cuatro amplias brechas en el muro cerca de Yuma, protegerán mejor a los migrantes que pueden resbalar por una pendiente o ahogarse al caminar por una sección baja del río Colorado.
La agencia dijo en un comunicado que el secretario Alejandro Mayorkas, autorizó la finalización del proyecto cerca de la presa de Morelos, lo que refleja la “prioridad de la administración para desplegar medidas fronterizas modernas y eficaces y también mejorar la seguridad a lo largo de la frontera suroeste.” Inicialmente iba a ser financiado por el Departamento de Defensa, pero ahora se pagará con el presupuesto de Seguridad Nacional para 2021.
Las nuevas barreras sustituirán a los muros más cortos y obstaculizarán gravemente las vistas transfronterizas, incluido el horizonte de San Diego desde Tijuana, según el reverendo John Fanestil de Friends of Friendship Park, un grupo que defiende el acceso público al parque binacional inaugurado en 1971 por la entonces primera dama Pat Nixon.
Por su parte, el ecologista de Arizona, Myles Traphagen, que ha estado monitoreando el daño ecológico que ha dejado la construcción del muro fronterizo bajo la administración de Trump, dijo que el cierre de las brechas no será muy disuasivo.
Traphagen dijo que el área de Yuma se ha “convertido en la nueva isla de Ellis para Arizona, con personas que llegan allí desde países tan dispares como Etiopía, Cuba, Rusia, Ucrania, India, Colombia y Nicaragua”.
“La gente ha viajado por medio mundo en aviones, trenes y automóviles”, dijo, “así que esperar que cerrar cuatro pequeñas brechas vaya a hacer que se den la vuelta y reserven un vuelo de regreso es una pura falacia”.
Es importante señalar que el sector de Yuma de la Patrulla Fronteriza, se ha convertido rápidamente en el tercero más concurrido de los nueve sectores de la frontera, y gran parte del tráfico se canaliza a través de la presa de Morelos. Los migrantes llegan a la pequeña ciudad de Algodones y caminan sin obstáculos a través de una cornisa hasta suelo estadounidense, donde esperan a que los agentes de la Patrulla Fronteriza los pongan bajo custodia.
Los agentes detuvieron a los migrantes más de 160.000 veces de enero a junio en el sector de Yuma, casi el cuádruple que en el mismo periodo del año pasado. Los únicos otros sectores con más tráfico fueron Del Rio y Rio Grande Valley, en el sur de Texas.
La zona ha sido especialmente atractiva para colombianos, venezolanos y otros que han volado a Mexicali, México, y han tomado un viaje corto en bús o taxi hasta Algodones para cruzar la frontera antes de ser liberados en Estados Unidos.
Con información de Click2Houston / Traducción: EVH…