
Son pocos, muy pocos, los países en el mundo que aparta algún día en su calendario oficial para celebrar la presencia de una cultura extranjera. Lo máximo que se ve es que inmigrantes de cierta nación hacen sus propias festividades para remarcar y justificar, de algún modo, su presencia en el país que los acogió.
En el caso de Estados Unidos la situación es muy particular. Durante un mes, no un día ni una semana, el Gobierno celebra la presencia hispana en estas tierras. Y no se trata de un simple “saludo a la bandera”: los hispanos son la “minoría” más grande de Estados Unidos (alrededor de 50 millones de habitantes), convirtiendo al español en el segundo idioma más hablado en este país.
En diciembre de 2014, la firma Gallup hizo un estudio sobre el comportamiento económico en Estados Unidos y encontró que el gasto medio de un hispano en el país es de unos 96 dólares, siendo el más alto de cualquier grupo étnico del país. Incluso, los latinos gastan por lo menos $10 más por visita a un establecimiento de compra que los no latinos.
Como otra muestra del poderío económico de los hispanos en EE.UU., la misma empresa revela que McDonalds y Starbucks generan más de 500 mensajes en español en redes sociales al día, con una fuerte presencia en público entre 14 y 34 años, todos ellos hispanohablantes.
El poder de compra de los latinos se duplicó entre 2010 y 2015, con un aproximado de $1,5 trillones. Esto quiere decir que si todos los hispanos residentes en Estados Unidos se formaran en un país independiente, se convertirían en una de las 20 economías más poderosas del mundo.
Mientras algunos lanzan discursos xenofóbicos que revelan una total ignorancia, muchos otros políticos buscan conquistar el voto hispano. Alrededor del 75% de los latinos en EE.UU. votó por Barack Obama, inclinando fuertemente la balanza a su favor.
¿Queda alguna duda que Estados Unidos es una nación que, año tras año, se hace más hispana?
EVHouston
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