
El líder del cartel del Sinaloa, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, está siendo vigilado por perros entrenados para detectar específicamente su olor. Esta es solo una de las tantas medidas de seguridad para evitar otra fuga del capo, que se encuentra de nuevo en la cárcel de El Altiplano.
Esta información fue divulgada por el periodista Carlos Loret en su columna del diario El Universal donde indica que los perros se mueven acompañados por un guía humano dentro de la prisión de máxima seguridad.
Cuando Guzmán se traslada dentro de la prisión lo hace vigilado por guardias que portan cámaras de video en sus cascos, y uno de ellos permanece siempre frente a su celda para grabar los movimientos del narcotraficante.
De igual manera, se destaca que el Chapo fue cambiado siete veces de celda durante sus primeras cinco noches en la prisión. Cada traslado fue autorizado por el comisionado del Órgano Administrarivo desconcentrado de Prevención y Readapatación Social (OADPRS) de la CNS, Eduardo Guerrero Durán
Guzmán fue recapturado el 8 de enero pasado en los Mochis, estado de Sinaloa tras haberse fugado el pasado 11 de julio de 2015 de la cárcel de máxima seguridad El Altiplano por un túnel de 1,5 kilómetros de largo.
Las autoridades revisaron las condiciones de la prisión y los protocolos de seguridad, introduciendo los perros “huele-Chapo”, como los han denominado, reforzando los pisos con mallas de acero y cambiando constantemente de celda al prisionero, señaló el diario.
Por su parte, los abogados Guzmán se han quejado de que su cliente está “incomunicado” y de que no se les permite entregarle ropa adecuada para el clima de la zona donde está la prisión.
EV HOUSTON / Foto: Cortesía