
Fernando (antes María) tenía un retraso en su periodo y pocos días después se enteró que estaba ”embarazado” por lo que envió un mensaje texto a su pareja confirmándole que serían padres. Diane (antes Luis) asegura haber dado la ”Peor conferencia de su vida” ante un auditorio que esperaba escuchar los avances y reivindicaciones de la comunidad transgénero.
Diane publicó después en su cuenta twitter “Voy a ser mamá, mi novio Fernando Machado está embarazado”. Este caso ha supuesto un revuelto en América Latina ya que son primera pareja transgénero en la región que han hecho pública su maternidad/paternidad por métodos naturales.
Diane Rodríguez, de 33 años, es una mujer transfemenina que aunque no lleva a su hijo en el vientre lo vive “con tanta alegría e intensidad” como su esposo Fernando, un hombre transmasculino que nació hace 22 años.
Diane y Fernando son de origen venezolano, actualmente son activistas de la comunidad de gays, lesbianas y transgéneros en Ecuador. La pareja se conoció a través de las redes sociales hace 2 años y poco después comenzó una vida en común en Guayaquil.
Su técnica para el embarazo fue coital ya que la transexualización de ambos no ha sido quirúrgica, lo que les permitió concebir biológicamente a su hijo. Apoyados por sus familias, la pareja sufrió un proceso ‘hormonización’ pero “afortunadamente no quedaron dañados nuestros aparatos genitales”, explica Diane a Associated Press.
“Siempre pensé en tener hijos pero me imaginaba adoptándolos o a través de un vientre de alquilerl nunca de forma biológica”, explica Diane muy activa en las redes sociales, donde ha hecho público el embarazo.
Diane y Fernando han decidido no conocer el sexo de su hijo o hija sino hasta el momento en que nazca. Por el momento, las primeras ecografías que la pareja ha colgado en su página de Facebook descartan que el niño tenga problemas médicos, a pesar del tratamiento hormonal al que la pareja ha sido sometidos en los últimos meses.
Ecuador aprobó durante el gobierno de Rafael Correa la unión libre de parejas del mismo sexo y la posibilidad de cambiar de género en documentos públicos.
EV HOUSTON / Foto: cortesía