Las autoridades chinas han puesto a cinco turistas más del país en la lista negra nacional, que con ellos asciende a veintiuno, por su comportamiento incívico mientras viajaban en los pasados meses.
Tres de ellos, provenientes de la provincia occidental de Sichuan, se enzarzaron en una pelea en octubre cuando una de las implicadas reclinó su asiento del avión con ruta a Chengdu (capital de Sichuan), lo que provocó la protesta de la pareja sentada detrás.
Los tres fueron forzados a abandonar el avión tras provocar un retraso del despegue de más de una hora, indica hoy la Administración de Turismo de China.
Por otro lado, un ciudadano de Shanghái propinó en septiembre un puñetazo al dependiente de una tienda de alimentos en Sapporo, Japón, que había advertido a su esposa que dejara de manipular algunos productos del establecimiento antes de pagarlos.
El protagonista del último incidente fue un hombre de Hunan (centro) que se peleó con un guía turístico y le golpeó en la cabeza con una taza de té para no pagar la entrada de su hijo en una excursión de un día por una zona montañosa en Sichuan en agosto.
El menor superaba los 120 centímetros de altura estipulados para los niños, por debajo de los cuales no es necesario pagar.
Se trata de los últimos casos de la lista negra de turistas chinos en lo que va de año, muchos de los cuales debidos a comportamientos problemáticos durante vuelos, indica la Administración de Turismo.
Algunos sucesos previos incluyen desde intentar abrir la puerta de emergencia del avión a tirar agua caliente sobre una azafata del aparato.
Los turistas incluidos permanecerán entre uno y tres años en la lista, la cual es enviada a agencias de viaje, compañías aéreas y otras organizaciones, dificultando sus desplazamientos.
Los medios estatales chinos se han hecho eco en el pasado año de estos casos, que lamentan que dañan la reputación de los turistas oriundos de este país en el extranjero.
EFE / Foto: EFE