El gobernador del estado de Texas, Greg Abbott, decidió tomar en sus manos el gran número de cruces ilegales por la frontera. El mandatario asegura que advirtió al secretario de seguridad de los Estados Unidos, Jeh Johnson, sobre los menores sin acompañantes que se encuentran en la frontera y pidió que se accionara diversos planes antes de que se convirtiera en una crisis incontrolable.
“Mi pedido de más patrullas fronterizas y más recursos estratégicos para asegurar la frontera fueron ignorados” dijo Abbott.
Asimismo señaló que aquella preocupación se ha vuelto realidad, pues, hubo un aumento sustancial en los cruces, una vez más, desafiando la seguridad y los recursos del estado. Abbott indicó que el gobierno federal agravó su negligencia cuando no dio previo aviso sobre la reubicación de inmigrantes en el estado de Texas.
Según los datos de patrulla fronteriza indica que desde octubre a noviembre la cifra de detenidos son de dos a tres veces más altas que en el 2014. En el sector Big Bend la llegada de menores en ese período aumento casi diez veces. En el sector de Rio Grande llegó a la cifra de 6,465.
“Texas no va a cruzarse de brazos frente a este desafío”, agregó el gobernador Abbott. “No vamos a ser víctimas por la respuesta apática del gobierno federal para la seguridad fronteriza”.
Entre los planes del gobernador Greg Abbott está el despliegue de las tropas de la guardia nacional en locaciones estratégicas de la frontera con el objetivo de reducir el cruce ilegal; Instruir al Departamento de Seguridad Pública para aumentar las misiones de observación aérea y ayudar a los esfuerzos de interdicción; aumento de agentes de la patrulla fronteriza en Texas.
EV HOUSTON / Foto: Referencial