
La carismática monja Mary Angelica, falleció este domingo de Pascua, a los 92 años de edad a causa de una enfermedad cerebral que padecía desde el 2001.
“La Madre Angélica” como era conocida por todos sus seguidores, fue la fundadora de la Eternal World Television Network (EWTN, Red Televisiva del Mundo Eterno). Sus inicios fueron desde un garaje de un monasterio, donde decidió darle rumbo a un apostolado televisivo que creció hasta convertirse en un imperio global de medios de comunicación religiosos.
“La madre siempre lo ha hecho, y siempre personificará a la EWTN, la red que ella fundó. Ante la enfermedad y largas pruebas de sufrimiento, el ejemplo de alegría y perseverancia en la oración de la madre ejemplificaba el espíritu franciscano que le era tan querido. Le agradecemos a Dios por la madre Angélica y por el regalo de su vida extraordinaria”, dijo Warsaw en un comunicado de prensa el domingo por la noche.
La salud de la religiosa comenzó a deteriorarse desde el 2001 cuando sufrió una severa hemorragia cerebral, lo que trajo como consecuencia que jamás recuperara el habla por completo. Posteriormente, sufrió dos nuevos episodios menos severos al pasar los años.
A pesar de sus problemas de salud, la madre Angélica dijo a sus compañeras en el monasterio que deseaba “seguir viva el mayor tiempo posible”.
Algunas de las frases más conmovedoras y contundentes que dejó la Madre Angelica han sido seleccionadas para mejorar tu vida cristiana, a continuación:
“Aquellos que dicen la verdad te aman. Los que te dicen lo que quieres oír se aman a sí mismos”.
“El amor no es un sentimiento; es una decisión”.
“Incluso el diablo cree que Dios existe. Creer tiene que cambiar la forma en que vivimos”.
“Dios quiere que estés en el mundo, pero que seas tan diferente del mundo hasta que lo cambies. Manos a la obra”.
“No se puede ir al cielo odiando a alguien. Perdona ahora”.
“Si tienes una cruz, cárgala. Es para hacerte santo”.
“Tus planes, proyectos, sueños tienen que ser siempre más grandes que tú, para que Dios tenga espacio para trabajar”.
“La fe es lo que te ayuda a comenzar. La esperanza es lo que te mantiene en marcha. El amor es lo que te lleva hasta el final”.
“La santidad es una hermosa lucha”.
“Si estás siguiendo a Dios, él nunca te muestra el final. Es siempre un camino de fe”.
“Una vez que contemplas la humildad de Jesús en la Eucaristía, ¿cómo es posible justificar tu orgullo?”
“Supongo que así debe ser morir: estar listo y ser capaz de mirar hacia atrás a las luchas de la vida y saber que Dios era tu compañero constante”.
María Fernanda González/EVHouston / Foto: Referencial