Las elecciones locales y regionales que se celebran hoy en Colombia llegaron a su ecuador en un clima de calma, interrumpido solo por un ataque de la guerrilla del ELN contra un grupo de militares que participaba en la operación de seguridad, que dejó un soldado muerto, y algunos incidentes menores.
Casi 34 millones de colombianos están llamados hoy a votar para la elección de 1.101 alcaldes, entre ellos el de Bogotá, una pugna electoral que acapara la atención de la jornada, así como 32 gobernadores y órganos legislativos locales y regionales.
El presidente Juan Manuel Santos, al hacer un balance a mitad de jornada, explicó que “el parte es muy positivo” y señaló que las cifras muestran descensos del 75 % en las amenazas contra los candidatos, del 47 % de hechos violentos y del 64 % de hostigamientos por parte de la guerrilla.
Santos lamentó la muerte del soldado Laureano Paternina Pérez en el ataque del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el municipio de Anorí, departamento de Antioquia (noroeste).
El mandatario también explicó que la jornada electoral se ha desarrollado con tranquilidad en departamentos donde habitualmente se registraban hechos violentos, como Nariño y Cauca, ambos en el suroeste.
Esta reducción de la violencia se debe en parte a los avances de las negociaciones de paz en la Habana entre el Gobierno y las FARC, que en otras épocas protagonizaba ataques contra el proceso electoral.
Además, Santos informó de que “el volumen de personas que están acudiendo a los sitios de votación es satisfactorio”, si bien no quiso facilitar los datos y pidió esperar al final del día para conocer los resultados de participación ciudadana.
“Entre menos abstención más fortalecida sale nuestra democracia”, subrayó el presidente sobre este fenómeno que tradicionalmente es del orden el 50 %.
Por su parte, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, afirmó en una declaración que se ha registrado la “mayor reducción de hechos de violencia.
“A partir del momento en que sonó el himno (que dio inicio a la jornada) han estado a disposición de las diferentes mesas todas las cartillas y materiales electorales correspondientes con excepción de nueve municipios”, adonde llegarán tardíamente por cuestiones meteorológicas, agregó.
En este sentido, hizo hincapié en que se ha registrado “una tranquilidad general” y recordó que ministros y viceministros están en las distintas regiones del país para seguir de cerca la jornada.
Desde el Puesto de Mando Unificado (PMU) en donde se realiza el monitoreo electoral y de orden público, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, reveló los casos más recientes de interceptación de personas que intentaban comprar votos.
En este sentido, Cristo explicó que fue detenido el alcalde de Quimbaya, departamento de Quindío (centro), quien transportaba 45 millones de pesos (unos 15.000 dólares).
Además, en el departamento de Córdoba (norte) un secretario de despacho fue detenido con 9,4 millones de pesos (unos 3.000 dólares) y en la entrada del municipio de Popayán, capital del departamento del Cauca fue detenido un ciudadano con 100 millones de pesos (unos 35.000 dólares).
En total las autoridades se incautaron en las últimas horas 1.703 millones de pesos (unos 583.000 dólares) aparentemente destinados a la compra de votos.
“La compra de votos es una práctica que no debemos permitir al igual que la ‘trashumancia electoral'”, una forma de comprar votos tipificada como delito en el código penal, subrayó Cristo.
El ministro afirmó que “con el combate a la trashumancia y a la compra de votos tendremos la oportunidad de elegir libremente a los mejores gobernantes”.
Hasta el momento, las autoridades se han incautado de 11.496 unidades de propaganda electoral, un arma de fuego, y 115 personas fueron detenidas en el marco de todo el proceso electoral.
La Policía informó además de que antes de la apertura de los colegios electorales fueron registrados algunos desórdenes en la localidad de Plato, departamento caribeño del Magdalena, y en Arjona, en el vecino Bolívar, situaciones que ya fueron controladas.
Pese a la restricción del porte de armas en la jornada electoral, en Riohacha, capital de La Guajira, en el extremo norte del país, cinco personas, entre ellas dos menores de edad, fueron asesinadas a tiros esta madrugada, al parecer por una guerra entre pandillas.
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