Las autoridades guatemaltecas han rescatado 131 muertos en un gran deslave que sepultó unas 125 viviendas en la periferia este de la capital y se desvanece encontrar sobrevivientes entre los 300 desaparecidos, informó este domingo una fuente oficial.
“Lamentablemente un nuevo recuento indica que son 131 los muertos que se han recuperado”, comentó a periodistas Julio Sánchez, del cuerpo de Bomberos Voluntarios y vocero del puesto de comando de rescate en el lugar de la tragedia.
El socorrista afirmó que todos los cuerpos recuperados ya fueron trasladados a la morgue provisional en el municipio de Santa Catarina Pinula, unos 15 km al este de la capital, lugar donde se encuentra la aldea Cambray II, que fue arrasada por toneladas de tierra la noche del jueves.
La tragedia es la más grande que se registra este año en este país centroamericano y supera a los terremotos que en 2012 y 2014 golpearon el suroeste del país, ambos desastres naturales dejaron unos 45 muertos en total.
El socorrista también anunció que las labores de rescate fueron suspendidas temporalmente debido a la lluvia que afecta esa la zona, y “es un riesgo trabajar en esas condiciones”, por lo que serán reanudadas el lunes en la mañana.
En un recuento anterior, las autoridades oficiales contabilizaban 96 muertos y 300 desaparecidos.
Las tareas de rescate se habían reanudado este domingo a contrarreloj, con unas 80 máquinas para remover escombros, aunque entre los socorristas cada vez quedaban menos esperanzas de hallar sobrevivientes. Sánchez dijo que este domingo a las 22:00, locales (04:00 GMT del lunes), terminan las 72 horas vitales para encontrar sobrevivientes, según las normas internacionales.
El vocero del comando de rescate comentó que con ese nuevo informe se aplazó para el lunes una rueda de prensa con un nuevo balance, que estaba prevista para esta noche.
En tanto, el vocero de los Bomberos Departamentales, Cecilio Chacaj, dijo a periodistas que en el lugar del desastre sólo trabajarán los socorristas, se prohibirá el ingreso a voluntarios y familiares y el acceso a la prensa será restringido por la vigencia de un protocolo de seguridad.
A su vez, el director ejecutivo de la estatal Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), Alejandro Maldonado, descartó que por el momento decreten un estado de calamidad pública en esa zona.
EV HOUSTON / Foto: Cortesía