EFE.- Habitantes de la ciudad colombiana de Cúcuta, en la frontera con Venezuela, salieron hoy a las calles para exigir más atención del Gobierno en una protesta convocada por la Central Única de Trabajadores (CUT).
Los manifestantes piden soluciones para los problemas económicos y sociales que vive esa ciudad, capital del departamento de Norte de Santander, que tiene gran dependencia de la actividad comercial con las vecinas ciudades venezolanas de San Antonio y Ureña, en el estado Táchira.
En la protesta cívica en distintas zonas de la ciudad participan principalmente taxistas, empresas de autobuses y vendedores informales de gasolina, llamados “pimpineros”, que reclaman por la falta de empleo, la crisis comercial y los altos precios de los servicios, entre otros problemas.
Algunos colegios suspendieron las clases por precaución y el transporte público se redujo, pero no se han registrado incidentes violentos.
El presidente Juan Manuel Santos dijo por medio de su cuenta de Twitter que su Gobierno está “estudiando medidas adicionales para Cúcuta” y anunció que convocará un consejo de ministros en esa ciudad, pero no dio fechas.
Mientras tanto, la Defensoría del Pueblo dijo que sus representantes en Cúcuta informaron del bloqueo de la vía que comunica a la ciudad con el estado venezolano de El Zulia.
“En las primeras horas de la mañana fue bloqueada también la vía sobre el puente Francisco de Paula de Santander a Ureña”, informó la Defensoría en un comunicado.
Sin embargo, el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez Lobo, manifestó que las autoridades no permitirán desórdenes ni bloqueos que impidan las actividades normales de la ciudad.
Para mantener el orden, decenas de hombres del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía salieron a las calles para reforzar a los agentes que habitualmente se ocupan de la vigilancia de la ciudad.
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