
El dirigente opositor venezolano Leopoldo López pidió al jefe de Estado, Nicolás Maduro, que renuncie a la Presidencia a través de una carta distribuida hoy entre los cientos de miles de personas que marcharon en contra de su gestión, un escrito en el que calificó al gobernante de “dictador de Venezuela”.
“Desde la cárcel le pido a Dios que te ilumine para que des el paso valiente y patriota de renunciar y así abrirle paso a un mejor futuro para todos los venezolanos”, se lee en la carta de López que fue leída por su esposa, Lilian Tintori, ante los manifestantes que atendieron a la convocatoria hecha por el mismo dirigente preso.
“También quiero decirte, a ti y a los que te acompañan, que de no dar el paso que te corresponde, nos tendrás a millones de venezolanos en las calles y fuera de ella, luchando para lograr el cambio político que nos corresponde como derecho, cuyas vías consagra nuestra Constitución”, apunta López en la carta.
El dirigente dijo que aunque está “encerrado y aislado” se siente “fuerte y firme” como el pueblo venezolano que desde hace más de un mes realiza protestas en contra del Gobierno de Maduro.
“Te invito a que desde la soledad del poder de quien no tiene la capacidad de conducir los destinos de la nación y solo le ha quedado la represión y la violencia, a que pienses cómo sería Venezuela si tu renunciaras”, dice López a Maduro en su misiva.
La gran sorpresa del día fue la aparición del dirigente de Voluntad Popular, Carlos Vecchio en la tarima principal de la concentración opositora.
El dirigente está preso en la cárcel militar de Ramo Verde, cercana a Caracas desde hace más de un mes, después de que una marcha convocada por el movimiento estudiantil y por el bando opositor al que pertenece, el 12 de febrero pasado, terminara en violencia y dejara tres muertes y decenas de heridos.
Un tribunal de Caracas cursó orden de aprehensión contra López el mismo día de la marcha acusándole entre otros cargos de homicidio y terrorismo, tras los enfrentamientos que se produjeron al término de esa manifestación y el dirigente se entregó a las autoridades el 18 del mismo mes.
Fue a partir de esa marcha que el país se sumió en una ola de protestas contra la gestión de Maduro que no ha parado y que, según datos oficiales, ha causado 31 muertes, más de 450 heridos y cerca de dos mil detenidos, de los que 121 permanecen en prisión.
Henrique Capriles criticó la OEA
Por su parte, el gobernador del estado Miranda y excandidato presidencial Henrique Capriles Radonski también marchó junto a los manifestantes y criticó a la Organización de Estados Americanos por haberse mantenido al margen de las protestas en Venezuela y por no haber escuchado las denuncias que iba a exponer ayer la diputada María Corina Machado.
Capriles expresó que lo sucedido en la OEA es una demostración de que en dicho organismo se defienden los intereses políticos de los gobiernos.
“Si la OEA no se reinventa morirá en la creencia de los venezolanos y en la de los hermanos de la América Latina. La OEA debe reinventarse para que las banderas que se levanten sean las de la democracia y de la de los derechos humanos”, dijo.
Expresó la necesidad de “construir un gran movimiento social que tenga la fuerza para plantarse frente al Gobierno y exigirle que cese con las posiciones intransigentes, con la violación de las leyes”.
Añadió que “la fuerza de ese movimiento social le impedirá al Gobierno que siga avanzando en su intento represivo y en la destrucción del país”.
Apuntó que se amerita el “debate en los barrios. Está en nosotros abrir ese diálogo y romper con la polarización. Debemos dialogar en base a los problemas que vivimos a diario, ya que sobre la base de los problemas que vivimos todos, nuestra lucha toma fuerza”.
La oposición colmó las calles
Miles de venezolanos divididos entre quienes critican al Gobierno y quienes lo apoyan tomaron hoy Caracas con sendas marchas, en el marco de las protestas que se realizan en el país desde hace más de un mes y que, según el presidente Nicolás Maduro, han dejado 10.000 millones de dólares en pérdidas.
La oposición pidió marchar “por la libertad” y el oficialismo llamó a movilizarse contra el vandalismo y la destrucción que han producido los manifestantes opositores.
La marcha de la oposición fue convocada por el dirigente opositor Leopoldo López, que está preso desde hace más de un mes en una cárcel militar cercana a Caracas, una invitación a la que se plegó la alianza de partidos de oposición y el movimiento estudiantil.
Los manifestantes de oposición se empezaron a concentrar desde temprano en cinco puntos del centro y el este de Caracas y desde cada uno de esos lugares salieron marchas encabezadas por diferentes dirigentes opositores para coincidir en una gran concentración en el municipio Chacao, que ha sido epicentro de las protestas.
“Hoy sábado 22 gran marcha en Caracas, Por la libertad #DaleUnParao, hay varios puntos de salida ubica el más cercano a ti”, dijo hoy el líder de la oposición venezolana Henrique Capriles.
Los oficialistas también salieron
Maduro también convocó hoy a la marcha en la que aseguró que participará y celebró que desde temprano estudiantes universitarios afines al oficialismo salieron a movilizarse por la paz en el centro oeste de Caracas.
“Yo desde aquí (…) le envío un saludo a los jóvenes estudiantes de Venezuela que están en las calles hoy y que me esperen que voy para esa marcha, salgo de aquí directo para esa marcha”, dijo Maduro desde el palacio presidencial de Miraflores donde encabezó un acto por el Día Mundial del Agua.
El presidente dijo que si hay alguna marcha que “ha tenido justificación” es la que se hace hoy pues se realiza para condenar los actos de vandalismo y destrucción que se han producido en el marco de las protestas que se han realizado desde el 12 de febrero pasado en el país contra su gestión.
Maduro aseguró el viernes que su Gobierno ha calculado en 10.000 millones de dólares los daños materiales “que le han hecho al país en estas cuatro semanas de guarimbas (barricadas) y de intento de golpe”.
Las protestas contra la gestión de Maduro se iniciaron el pasado 12 de febrero y se han mantenido hasta hoy, unas manifestaciones que en algunos casos han terminado en violencia y han dejado, según cifras oficiales, 31 muertos y 486 heridos, además de un millar de detenidos la mayoría de ellos ya en libertad por medidas cautelares.
EFE / *