
Una organización internacional dedicada a delitos informáticos, que operaba desde la ciudad de Maracaibo (Venezuela), estafaba a personas en Texas y otras regiones de Estados Unidos, haciéndose pasar como “empresa” ligada a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Funcionarios del Cuerpo de la Policía Bolivariana del estado Zulia (al oeste de Venezuela) arrestaron, ayer jueves, a cuatro mujeres y cuatro hombres que eran los encargados de contactar a las víctimas de Texas, Florida, Pensilvania, Chicago, California, entre otros estados.
La aprehensión fue practicada en una vivienda de la urbanización Rosal Sur (Maracaibo), ubicada en la avenida 12 con calle 41, vía a Fuerzas Armadas.
El comisario César Martínez Lugo, subdirector del Cpbez, informó que entre los detenidos está Dionni Gómez (53) y sus tres hijos Alex Fernández Pimiento (31), administrador del local, Litzzi Pimiento (20) y Martha Pimiento (29). Además, cayeron presos los empleados Henry González (57), Yohandry Dorante Urdaneta (24), Andrés Mendoza (24) y Eglis Contreras (26).
“Estamos tramitando otras órdenes de aprehensión. Una de éstas es contra una mujer de nacionalidad cubana, identificada como Milka Pérez. Era quien captaba a los empleados para la oficina en Maracaibo y fungía como conexión con otras dos personas, Maylen Mejías y Néstor Fernández, gerentes de la empresa llamada All New Natural, en Miami”, indicó otra fuente ligada a la investigación.
“Esta organización delictiva usaba el nombre de la OMS y, desde Maracaibo, llamaba a las personas que presentaban algún padecimiento de salud. Manejaban una lista detallada de las víctimas y los códigos postales de sus residencias en Estados Unidos. Les ofrecían productos naturales y una vez que hacía la venta y las personas pagaban con sus tarjetas de crédito, les debitaban todo su dinero en dólares”, explicó Martínez.
Voceros del Cpbez agregaron que estas divisas las transferían a una cuenta de Milka Pérez y de Alex Pimiento. “Luego de que los retiraban, vendían los dólares en el mercado paralelo”, sostuvo.
La policía desarticuló esta banda a través de una denuncia y se estima que la banda llevaba dos años operando.
Martínez aseguró que tenían una consola con cajetillas con los códigos postales conectadas a 12 líneas telefónicas para que las víctimas certificaran de que los llamaban desde EE UU.
“En la vivienda había 12 cubículos. Los empleados tenían pancartas hasta del discurso que le daban a sus clientes. Ellos cumplían dos turnos en esta empresa de estafadores”, advirtió.
El Comisario dijo que incautaron dos computadoras laptops, más de 100 tarjetas de crédito, 50 pasaportes, factureros, sellos, chequeras, routers y teléfonos.
Abraham Puche / EV Houston / Foto: Referencial