
El catolicismo continúa perdiendo adeptos en Latinoamérica en favor del protestantismo pese a que el actual papa procede de la región, aunque todavía hay 425 millones de católicos en la región, casi el 40 % del total mundial.
Según una encuesta difundida hoy por el Centro de Investigaciones Pew, con sede en Washington, el 69 % de los adultos de la región se sienten católicos, frente al 90 % que prevalecía durante la mayor parte del siglo XX, sobre todo porque muchos se han pasado a iglesias protestantes o simplemente rechazan la religión.
La tendencia a la baja sobre el número de católicos no se ha frenado, pese a que la Iglesia Católica cuenta con el primer pontífice latinoamericano, el papa Francisco, quien sin embargo sí obtiene una buena valoración de los ciudadanos.
El sondeo, realizado en 19 países de Latinoamérica y el Caribe, establece que dos tercios o más de la población latinoamericana tiene una opinión positiva del papa, y en 14 de los 19 países donde se hizo el sondeo al menos la mitad de los católicos dijeron tener una opinión “muy favorable” del pontífice.
“Si bien es demasiado pronto para saber si Francisco puede detener o revertir las pérdidas de la Iglesia en la región, en la nueva encuesta se ha descubierto que los católicos actuales tienen una imagen positiva casi unánime de Francisco y consideran que su papado es un cambio muy importante para la Iglesia”, apunta la encuesta.
Sin embargo, los excatólicos son más escépticos con respecto al papa, y sólo en Argentina y en Uruguay la mayoría expresa tener una imagen favorable de Francisco.
En todos los demás países incluidos en la encuesta tan solo la mitad de los excatólicos, aproximadamente, tienen una imagen favorable del pontífice y relativamente pocos ven en su pontificado un cambio importante para la Iglesia Católica
En el 84 % de los casos, los latinoamericanos dicen haber sido educados en la fe católica, lo que supone 15 puntos porcentuales más que los que ahora se reconocen como católicos.
Por ejemplo, cerca de uno de cada cuatro nicaragüenses, uno de cada cinco brasileños y uno de cada siete venezolanos ya no son católicos.
Frente a esto, ha habido un aumento entre los protestantes y los que no se identifican con ninguna religión, según el sondeo.
Si casi uno de cada diez latinoamericanos (9 %) dice haber sido criado en el protestantismo, actualmente casi uno de cada cinco (19 %) se identifican con las iglesias protestantes evangélicas.
El motivo principal que los encuestados dieron para haberse pasado de la Iglesia Católica a una protestante (al menos dos tercios en la mayoría de los países) es que buscaban una conexión más directa con Dios, según el estudio demoscópico.
Muchos excatólicos también dijeron que se hicieron protestantes porque querían un estilo de culto diferente o una iglesia que ayudara más a sus miembros.
Otras de las razones esgrimidas para convertirse al protestantismo desde el catolicismo fueron problemas familiares o de salud (un media regional del 20 %) o el matrimonio con alguien no católico (9 %).
Según explica el estudio, los protestantes de América Latina, al igual que los de otras partes del mundo, pertenecen a diversos grupos de denominaciones e iglesias independientes.
Pero, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos, donde términos como “nacido de nuevo” y “evangélico” distinguen a ciertos protestantes, en América Latina los términos “protestante” y “evangélico” se usan indistintamente.
En cuanto a aquellos que declaran no haber sido criados en ninguna fe religiosa, los datos apuntan sólo a un 4 %, mientras que los que dicen no seguir ninguna religión en la actualidad es el doble, de un 8 %.
La encuesta fue realizada por el Centro de Investigaciones Pew entre 30.000 personas de 19 países de Latinoamérica y el Caribe entre octubre de 2013 y febrero de 2014, y el margen de error varía entre los países, de un 2,9 % a un 4,0 %.
EFE / Foto: Referencial