
¿Recuerdan la taquillera película “Armageddon” (1998), protagonizada por Bruce Willis y Ben Affleck? El filme trata sobre la destrucción de un cometa que amenazaba la vida en la Tierra y para ello enviaron a un equipo de expertos para descender (acometizar) sobre el asteroide y tratar de destruirlo con una bomba.
Esa increíble aventura es una realidad 15 años después, con el eventual contacto de la sona Rosetta sobre el cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko el día de hoy, aunque la intención no es destruir a ese objeto viajero sino estudiar su composición para comprender el origen y formación de los sistemas planetarios, incluyendo el nuestro, así como confirmar la teoría de que los elementos iniciales de la vida en la Tierra llegaron a través de cometas.
La sonda europea Rosetta ha lanzado el módulo Philae sobre el cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko, a una distancia todavía de 22 kilómetros y en el que aterrizará unas siete horas después para estudiar su composición.
La Agencia Espacial Europea (ESA) informó hoy desde su centro de control de operaciones en la ciudad alemana de Darmstadt que la separación del módulo Philae se produjo a las 09.03 GMT.
El director de Vuelo de Rosetta, Andrea Acommazzo, dijo que la maniobra de separación se produjo con “éxito” y que Philae va de camino al cometa.
Es la primera vez en la historia que una nave está tan cerca de un cometa, algo que algunos expertos han comparado por su importancia científica y complejidad técnica con la llegada a la Luna o con la misión japonesa Hayabusa, que en 2005 hizo pruebas de la superficie de un asteroide.
La ESA volverá a recibir una señal de Philae a las 10.58 GMT, lo que mostrará que el módulo de acometizaje sigue vivo.
La sonda europea Rosetta se encontró en agosto con el cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko tras un viaje de diez años a través del Sistema Solar para estudiar su origen en un momento en que el cometa todavía no está activo porque se encuentra a una distancia de 450 millones de kilómetros del Sol.
El acometizaje se producirá previsiblemente en una zona llamada Agilkia, que está situada en una parte del cometa a la que le da el Sol porque el módulo se alimentará con energía solar.
De momento, no es completamente seguro que se vaya a producir el contacto con el asteroide y es posible que Philae no logre engancharse al cometa en la maniobra de aterrizaje.
Philae, si sobrevive, medirá el campo magnético del cometa y tomará pruebas, de hasta 30 centímetros de profundidad, de los materiales de la superficie del núcleo en la fase de máxima actividad, cuando se acerca al Sol.
La ESA va a estudiar en detalle el desarrollo de la coma del cometa, averiguar el agua que tiene dentro y la expulsión, ver qué tipo de agua es y si es como la de la Tierra, ya que en caso de que sea así fueron los cometas los que trajeron el agua a la Tierra.
La ESA también estudiará si hay moléculas complejas -origen de la vida- y si fueron los cometas los que pudieron haberlas traído también a la Tierra.
EV Houston / EFE