Los estadounidenses comenzaron a votar hoy en el este del país para renovar la Cámara de Representantes, un tercio del Senado y 36 gobernadores, en unos comicios que pueden dar a los republicanos el control del Congreso y limitar así la capacidad de gobierno del presidente Barack Obama.
Estados Unidos, con 9,8 millones de kilómetros cuadrados que abarcan seis zonas horarias, vota escalonadamente desde la apertura de los primeros centros electorales a las 6.00 en la costa este (11.00 GMT) hasta los últimos cierres en California (4.00 GMT del miércoles) y Alaska (5.00 GMT del miércoles).
Un total de 206 millones de estadounidenses conforman el electorado de estas legislativas, según los últimos datos de la Oficina del Censo, de los cuales sólo 145 millones están registrados para votar.
Una cifra récord de latinos son elegibles para votar en estas elecciones, 25,2 millones (el 11 por ciento del total), pero su proporción menor en los estados más reñidos impedirá que ese crecimiento a nivel nacional se note sustancialmente en estos comicios, según datos del Centro de Estudios Pew.
Las elecciones de medio mandato atraen históricamente a menos votantes que las presidenciales (se espera una participación de en torno al 40%) y se plantean como un referendo sobre la gestión del partido que ocupa la Casa Blanca, que acusa el desgaste de gobernar y siempre pierde escaños en el Congreso en estos comicios.
En esta ocasión, con Obama en sus horas más bajas y una popularidad que no remonta del 40% desde hace meses, los republicanos han centrado sus esfuerzos en buscar un voto de castigo a las políticas del presidente.
En estas elecciones se renueva toda la Cámara de Representantes (en la que los republicanos podrían ampliar su mayoría), un tercio del Senado y 36 gobernadores, además de otros cargos en las administraciones estatales y locales.
Una mirada a las noticias, sucesos e historias de los que se hablará el día de las elecciones:
TODOS LOS OJOS EN EL SENADO
Los republicanos necesitan seis escaños para tomar el control de la cámara y están en buena posición para conseguirlos. Un Senado republicano dejaría al presidente, Barack Obama, sin aliados en la mayoría parlamentaria para sacar adelante sus proyectos en los dos años que le quedan en el cargo. Pero con dos carreras que podrían llegar a segunda vuelta, quizá no sepamos quién se quedará con el Senado hasta dentro de varias semanas.
¿PUEDEN LOS DEMÓCRATAS QUE OPTAN A GOBERNADOR CAMBIAR LA TENDENCIA?
Los demócratas esperan que las carreras a gobernador pongan el punto positivo en este año de elecciones. Pero incluso en la demócrata Nueva Inglaterra se ven a la defensiva ante fuertes candidatos republicanos. Obama salió a hacer campaña por los gobernadores en el último tramo de la carrera, así que sus resultados podrían dar pistas de si todavía puede motivar a los fieles del partido.
LOS REPUBLICANOS ASPIRAN A AVANCE HISTÓRICO EN CONGRESO
En realidad, los demócratas no tienen posibilidades de recuperar el Congreso. La cuestión es cómo de grande será la mayoría republicana. El pegadizo lema de los congresistas conservadores alude al objetivo de 245 escaños, 11 más de los que tienen ahora. Eso supondría superar la oleada del tea party en 2010 que les ayudó a conseguir 242 representantes. Si logran más de 246, batirían el récord del partido desde la Segunda Guerra Mundial, fijado entre 1947 y 1949 durante el gobierno de Truman.
POLÍTICA SOBRE MARIHUANA
Entre las 140 medidas concretas que se dirimirán el martes hay cuatro iniciativas para legalizar el consumo de marihuana. Oregon, Alaska y el distrito de Columbia decidirán si permiten su uso recreativo, mientras que Florida plantea una medida para legalizar su uso con fines médicos. Colorado y Washington legalizaron el consumo recreativo hace dos años con el respaldo de las masas de jóvenes votantes que salieron a votar por Obama. ¿Pueden los partidarios de estos comicios conseguir suficiente apoyo en unas elecciones de media legislatura, en las que el electorado tiende a ser mayor y más conservador?
IMPACTO TECNOLÓGICO EN PARTICIPACIÓN
La historia de Estados Unidos refleja una participación más baja en las elecciones de media legislatura que en las presidenciales. ¿Puede la tecnología moderna cambiar la tendencia? Ambos partidos emplean sofisticados métodos para buscar y reclutar votantes desde las elecciones de 2008 y 2012. Y cada vez emplean métodos más personalizados para llevarles a las urnas, incluyendo voluntarios entrenados y empleados de pago. Los demócratas tienen más en juego, dado que sus votantes son más propensos a no participar en los comicios de media legislatura, y han puesto sus esperanzas en la estrategia de motivación.
Con información de Telemundo Houston
EFE/Telemundo/EVHouston / Foto: EFE