
El optimismo con el que se vivió en Cuba la noticia del restablecimiento de sus relaciones con Estados Unidos abrió hoy paso a la expectativa de que este giro diplomático histórico se traduzca en mejoras en la vida cotidiana de la isla y solucione problemas como el desabastecimiento o las comunicaciones.
En las calles reina la tranquilidad, aunque el tema de conversación generalizado era el reinicio de los vínculos con Estados Unidos, acontecimiento recibido con alegría, pero con la incertidumbre de cuándo y cómo se concretarán estos cambios y si culminarán en el fin del embargo económico.
El levantamiento del “bloqueo”, como se refieren en la isla a esta política vigente desde 1962, “será una noticia muy buena, ante todo, para el pueblo cubano que es el que realmente ha sufrido y sigue sufriendo el embargo de Estados Unidos”, dijo a Efe el cubano Yosbany Barrio.
Su compatriota Ariel Rodríguez consideró que el acuerdo anunciado ayer abre la posibilidad de que se elimine el “bloqueo” y acaben “todas esas carencias sufridas durante tanto tiempo y que no son un secreto para nadie”.
“El cambio va a ser bueno no sólo para nosotros, sino para los familiares que están del lado de allá (en EE.UU.), que son muchos los cubanos allí que quieren que se normalicen las relaciones”, afirmó.
Las medidas anunciadas el pasado miércoles por la Casa Blanca, que alivian considerablemente el embargo, van a facilitar la reunificación de las familias separadas por el exilio, al flexibilizar restricciones al envío de remesas y liberalizar los viajes para los que mantienen lazos familiares en la isla.
Fruto del acuerdo, Washington también elimina las licencias antes necesarias para viajar a Cuba por motivos educativos, religiosos y culturales, algo que, según el “número dos” del Gobierno cubano, Miguel Díaz-Canel, va a incrementar los intercambios académicos entre ambos países y “beneficiará a todos”.
“Si a pesar de los obstáculos, en el pasado se buscaron formas de contacto, ahora el intercambio aumentará y lo mantendremos siempre a partir del respeto mutuo por nuestras diferencias”, dijo el vicepresidente cubano, en la única reacción oficial hoy al nuevo rumbo de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Dudas por el lado anticastrista
Desde la disidencia hoy se han vuelto a escuchar voces escépticas sobre las posibilidad de que el acuerdo con Estados Unidos se traduzca en cambios sustanciales para la sociedad civil, especialmente en materia de derechos humanos.
“No oculto mi escepticismo profundo, que tiene como fundamento la manifiesta falta de voluntad política del Gobierno de Cuba para hacer verdaderas reformas”, señaló a Efe el opositor Elizardo Sánchez, líder de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
A su juicio, las reformas económicas emprendidas por Raúl Castro para “actualizar” el modelo socialista de la isla, son sólo “cambios de pequeño calado”, “tardíos” y “reversibles”.
“El balón está en el lado de Cuba, que es el que tiene que hacer más para acercarse a los estándares internacionales en derechos humanos”, precisó.
Frente al optimismo de las calles y el escepticismo de algunos opositores; la reacción oficial se ha centrado en celebrar el regreso a la isla de los tres agentes cubanos del grupo de “Los Cinco”, por encima del restablecimiento de las relaciones con Estados Unidos.
Los diarios oficiales “Granma” y “Juventud Rebelde”, los únicos en la isla, titularon hoy sus portadas con un “Volvieron” en letras grandes y destacan la imagen del encuentro entre Raúl Castro y el grupo de “Los Cinco Héroes”, como se conoce en la isla a esos agentes, cubanos presos en Estados Unidos desde 1998 y condenados a largas penas en 2001.
Aunque con matices, el ambiente general es de incertidumbre y expectación sobre la velocidad a la que se producirá el acercamiento entre Cuba y Estados Unidos, noticia que cogió por sorpresa al mundo entero.
“Ha sido algo inédito e inesperado. Se esperaba algún cambio antes de la Cumbre de las Américas, pero no algo tan profundo”, indicó hoy a Efe el diplomático y académico cubano Carlos Alzugaray.
Alzugaray indicó que las partes tienen por delante dos años, antes de las elecciones presidenciales en Estados Unidos para seguir estrechando vínculos, periodo en el que cree que Obama explotará sus capacidades ejecutivas para relajar el embargo si no consigue que el Congreso lo anule.
Aunque posiblemente no se den cambios sustanciales en la vida cotidiana de Cuba a corto plazo, en los próximos meses se vivirán gestos diplomáticos significativos, como la visita enero de una delegación estadounidense de alto nivel para el diálogo migratorio o la apertura de una embajada.
Disidentes en Miami protestan
La Asamblea de la Resistencia Cubana, integrada por grupos de dentro y fuera de la isla, llamó hoy a una movilización mañana sábado en Miami en contra de las “concesiones” hechas por el presidente Barack Obama al “régimen totalitario del general Raúl Castro”.
La concentración, que tendrá lugar en el popular parque público José Martí, se produce dos días después de que Obama y Castro anunciaran el deshielo y la normalización de las relaciones bilaterales, una medida que fue recibida como un mazazo por numerosas organizaciones del exilio en Miami.
Al rechazo expresado por una buena parte de la comunidad cubana a las “concesiones” de Obama se han sumado los legisladores republicanos de Florida, “indignados” también por el giro de la Casa Blanca, que preparan ya “todo tipo de acciones” para bloquear en el Congreso la decisión presidencial.
La movilización de la Asamblea, entre cuyas organizaciones destaca el Directorio Democrático, dará a conocer los tres puntos de su frontal rechazo al acercamiento de EE.UU. al Gobierno cubano.
En primer lugar, la manifestación ahondará en lo que los activistas califican de “concesiones” de Washington al “régimen totalitario” de La Habana, después se llevará a cabo un acto de “desagravio” en memoria de los pilotos de Hermanos al Rescate que murieron en 1996 en un ataque de aviones cubanos.
El tributo será para Armando Alejandre Jr., Carlos Costa, Mario de la Peña y Pablo Morales, “asesinados en aguas internacionales por aviones castristas”, según los convocantes.
Dentro de este histórico giro en las relaciones con la isla caribeña, EE.UU. decidió liberar a los tres agentes cubanos de la “Red Avispa” que aún estaban presos en este país, mientras que Cuba puso en libertad al contratista estadounidense Alan Gross y a un espía estadounidense de origen cubano, encarcelado en el país caribeño, que trabajó para la CIA.
El tercer punto que abordarán los grupos en la concentración será el “respaldo a la resistencia interna cubana en su lucha cívica y no violenta por la libertad de Cuba y contra la violación de los derechos humanos en la isla”, señaló la Resistencia en un comunicado.
EFE / Foto: EFE