El presidente panameño, Ricardo Martinelli, inauguró el estadio “Maracaná”, en el barrio de El Chorrillo, en la periferia de la ciudad capital, con un partido amistoso en el que intervinieron figuras históricas del fútbol brasileño como Bebeto, Dunga, Rivaldo y Careca.
El “Maracaná”, homónimo al principal estadio brasileño que será sede de la final de la Copa del Mundo de este año, tiene capacidad para 5.500 personas y forma parte del proyecto de la Cinta Costera III, cuya inversión ascendió a 782 millones de dólares y que fue inaugurado también esta semana.
Martinelli, quien se animó a dar unas patadas al balón, expresó que le daba “alegría” ver “esta cinta costera y este Maracaná a la entrada del Canal de Panamá”; y aseguró que “de aquí saldrán jugadores de Panamá que serán gloria Mundial”.
Los ex integrantes de la selección brasileña, entre los que también se encuentran Ronaldao y Viola, participaron en un partido de exhibición con figuras “legendarias” de los barrios de El Chorrillo y Plaza Amador, entre los que estuvieron Germán Julio, Roberto Corbin, Luis Ernesto “Cascarita” Tapia y Ricardo Buitrago, quienes en algún momento vistieron la camiseta de la selección nacional de Panamá.
El estadio chorrillero del “Maracaná”, con las medidas mínimas exigidas por la FIFA, será el hogar de los clubes de la liga local El Chorrillo y Plaza Amador, pero también será utilizado para el entrenamiento de las diferentes selecciones nacionales.
Los ex “cracks” de la selección brasileña campeona del mundo en Estados Unidos 1994, Carlos Caetano Bledorn Verri “Dunga” y Roberto Gama de Oliveira “Bebeto”, coincidieron en señalar en una rueda de prensa previa, que el estadio contaba con una muy “buena infraestructura” y que la grama sintética “parecía” natural.
“Será interesante jugar en esta cancha”, aseveró Dunga a los periodistas horas antes del encuentro amistoso.
La instalación, construida por la empresa brasileña Odebrecht Infraestructura, incluye un moderno sistema de iluminación que permitirá la realización de transmisiones televisadas, palcos, áreas de venta de alimentos y bebidas, salas de prensa, vestuarios para árbitros, equipos locales y visitantes; baños públicos, sala de enfermería y un área para realizar exámenes de antidopaje.
El original estadio “Maracaná” panameño fue construido en 1975, como un complejo deportivo en el que albergaba un campo para jugar fútbol, baloncesto, voleibol y béisbol infantil, pero que con el tiempo fue únicamente sede de los torneos de fútbol locales para mayores de 50 años, algunos de los cuales vieron acción en la noche del viernes.
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