El Tribunal Supremo de Texas avaló el viernes el divorcio de un matrimonio homosexual, una controvertida decisión en un estado que no reconoce las uniones entre personas del mismo sexo.
Angelique Naylor y Sabina Daly se casaron en Minnesota en 2004 y seis años más tarde tramitaron su divorcio en el Tribunal del Distrito del condado de Travis, una decisión que el estado de Texas trató de impugnar al considerar que “reconocía implícitamente” la existencia de matrimonios homosexuales.
El Supremo de Texas falló con 5 votos a favor y 3 en contra para avalar el divorcio, al argumentar que el estado no fue parte en el litigio y que además, no protestó a tiempo.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, quien en 2010 interpuso la demanda contra el divorcio desde su cargo de procurador general, dijo que el fallo del Supremo es “decepcionante” y “jurídicamente erróneo”.
“En Texas y todas sus subdivisiones sigue prohibido por la Constitución estatal dar efecto a un matrimonio entre personas del mismo sexo o cualquier documento que lo reconozca, incluyendo una sentencia de divorcio”, agregó.
En 2005, el 76.25 % de los texanos votaron en referendo en contra del matrimonio homosexual, mientras que el 23.75 % lo hizo a favor.
Curiosamente, el condado de Travis fue el único de los 254 que integran este estado eminentemente conservador que se mostró favorable al matrimonio homosexual.
Texas, como el resto del país, está pendiente de una decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos que fallará inminentemente sobre la legalidad de estos enlaces en todo el país.
EFE / Foto: Referencial