En una audiencia que mantuvo a Washington conteniendo la respiración, por la sensibilidad del testimonio, Comey reafirmó su versión sobre las presiones del mandatario republicano, pero indicó que no le cabía definir si ese hecho constituía una tentativa de obstruir la justicia.
“No pienso que deba decir si las conversaciones que tuve con el presidente fueron obstrucción de justicia. Fue una cosa muy perturbadora, desconcertante”, dijo Comey ante la comisión de inteligencia del Senado.
Comey aseguró que cree que fue despedido por el presidente estadounidense por la forma en que estaba gestionando la investigación sobare la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016 y por la “presión” de la misma sobre el mandatario.
“No fui despedido por la investigación sobre Rusia sino por cómo estaba dirigiendo esa investigación”, dijo.
“Que Rusia intervino en nuestras elecciones no tiene nada de falso”; actuó con “propósito, sofisticación y medios apabullantes”, agregó Comey.
Recordemos que este miércoles, Comey dio a conocer un adelantó por escrito de su testimonio, en un documento de siete páginas que tuvo el efecto de un verdadero torbellino político al narrar detalles de sus conversaciones con Trump en la Casa Blanca.
En ese momento, Comey conducía una investigación sobre la alegada interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, y uno de los funcionarios bajo sospecha era el entonces asesor presidencial de Seguridad Nacional, el general Michael Flynn.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE