
Hoy 31 de mayo se celebra el Día Mundial sin Tabaco, una fecha que fue designada en 1989 por la Asamblea Mundial de la Salud.
La misma tiene como objetivo exhortar a la población a dejar la nicotina, el elemento principal del tabaco, pues produce dependencia y adición, sin mencionar que su costo representa un gasto considerable.
El fumar está relacionado con ciertos tipos de cáncer, entre ellos de pulmón, colón, recto, estómago e hígado. También ha sido asociado con enfermedades como bronquitis, pulmonar obstructiva, coronarias, vascular periférica y disfunción eréctil.
Sin embargo, el cigarrillo no solo afecta al fumador activo, quien es el que lo consume directamente, sino también a aquellos, denominados fumadores pasivos, que se encuentra alrededor.
Los fumadores pasivos sufren consecuencias, tales como; asma, neumonía, bronquitis, infecciones del oído, irritación de ojos y nariz, dolor de cabeza, nausea, mareo, inflamación de la garganta, tos y toda clase de problemas respiratorios.
Es importante destacar que cuando una mujer embarazada es “activa”, el feto es considerado “pasivo”, pues los componentes del cigarro atraviesan la placenta, pudiendo hasta provocar la muerte.
Varios países han empezado a prohibir fumar en espacios públicos, instituciones y lugares de trabajo. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 250 millones de los niños morirán a causa del tabaco.
Sin embargo, al deshacerte del cigarrillo tendrás más energía, eliminarás el mal aliento, tus dientes tendrán un mejor aspecto y tendrás mejor percepción de olores y sabores.
¿Qué esperas para salvarte y a los tuyos?
Maholy Leal Medina/EV Houston / Foto: Referencial