
Comenzó la temporada de huracanes y de acuerdo a las predicciones se pronostica la formación de 23 ciclones: 14 en el Océano Pacífico y 9 en la zona del Atlántico, Golfo de México y Mar Caribe.
De las nueve tormentas tropicales y tres huracanes, de los cuales uno pudiera ser de categoría 3 o más alto, un promedio por debajo del promedio de fenómenos del Atlántico, de 12 tormentas por temporada, seis huracanes y tres huracanes mayores, según destacan Phillip Klotzbach y William Gray de la Universidad Estatal de Colorado, “una temporada que podría ser calmada”.
Los expertos atribuyeron la predicción, en esta ocasión por debajo de lo normal, debido a un clima más frío que el promedio en el Océano Atlántico y un tipo moderado de El Niño (fenómeno climático cíclico que provoca estragos a nivel mundial, y las zonas más afectadas son de América del Sur y las regiones entre Indonesia y Australia, provocando con ello el calentamiento de las aguas sudamericanas, que se desarrolla a finales del verano o en el otoño.
“El Atlántico tropical se ha enfriado de una forma anómala en los últimos meses y las posibilidades de un evento moderado a fuerte de El Niño este verano y otoño parece ser bastante alto”, dijo Klotzbach. “La información histórica indica que se forman menos tormentas bajo estas condiciones”.
El pronóstico del 2013 fue de 18 tormentas, nueve huracanes y cuatro huracanes mayores. Pero solamente se desarrollaron 14 tormentas y dos huracanes, ninguno de ellos de mayor grado.
Sin embargo, por el probable desarrollo de un evento de “El Niño”, en el transcurso del verano y otoño, se estima una temporada de ciclones tropicales por arriba del promedio normal en el Pacífico. De los 14 ciclones previstos para el Océano Pacífico, se estima siete sean tormentas tropicales y siete huracanes, cinco de ellos intensos.
2012 y 2014 han sido los únicos años en la última década en la que Gray ha pronosticado una temporada por debajo de lo normal en su reporte de pretemporada. El órgano pronosticó 10 tormentas en 2012. Ese año terminó empatando la tercera temporada con el mayor número de tormentas, con 19.
El reporte de 2014 también incluye la probabilidad de huracanes mayores que tocarán tierra en territorio estadounidense.
• 35% de toda la línea costera de Estados Unidos (un promedio del 52% en el último siglo).
• 20% para la Costa Este, incluyendo la península de Florida (un promedio de 31% en el siglo pasado).
• 19% para la Costa Golfo desde Panhandle Florida oeste hasta Brownsville, Texas (un promedio de 30% en el último siglo).
• 28% para el Caribe (un promedio de 42% en el siglo pasado).
Los nombres asignados en este 2014 son Arthur, Bertha, Cristóbal, Dolly, Edouard, Fay, Gonzalo, Hanna, Isaías, Josephine, Kyle, Laura, Marco, Nana, Omar, Paulette, Rene, Sally, Teddy, Vicky y Wilfred.
¿Cómo surge la idea de nombrar los huracanes?
Cuando un ciclón se convierte en una tormenta tropical recibe un nombre predeterminado. Actualmente las listas alternan nombres de mujer y hombre y son reutilizadas cada seis años, suprimiéndose de las mismas los nombres de los huracanes que fueron muy destructivos o que, por una u otra razón se recuerdan por sus fatales consecuencias.
• El primer meteorólogo que utilizó un nombre propio para referirse a un huracán fue un australiano en los primeros años del siglo XX
• Durante la segunda guerra mundial (1939-1945) las tormentas tropicales recibieron, informalmente, nombres de mujeres por los meteorólogos de la Armada de los Estados Unidos de América
• A partir de 1950 las tormentas tropicales del Océano Atlántico norte se identificaron utilizando el alfabeto fonético (Alfa, Bravo, Charlie…)
• En 1953 el Buró del Tiempo de Estados Unidos de América los llamó únicamente con nombres de mujeres
• En 1979 la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Servicio Meteorológico de Estados Unidos (National Weather Service) incorporaron nombres alternos de hombres y mujeres.
• Actualmente los nombres se eligen en reuniones internacionales convocadas por la OMM y se conserva la alternancia de género. Las listas de nombres se utilizan cada 6 años. Se omiten las letras Q, U, X, Y y Z debido a la escasez de nombres que inician con dichas letras.
• Los nombres de huracanes muy destructivos se retiran, quedando en los registros históricos, y son sustituidos por otros que inician con la misma letra.
• Los nombres permiten una mejor identificación entre los servicios meteorológicos y los usuarios que reciben la información (informes de alerta, información en general), ya que particularizan el fenómeno y de esa manera se conoce a cuál fenómeno se refieren los boletines de alerta.
Es mejor prevenir que lamentar
El equipamiento de suministros para casos de desastre es una manera simple y eficaz para asegurarse para tener suficiente agua, alimentos, medicinas y otros suministros esenciales cuando otros recursos no estén disponibles. Es necesario tener en cuenta las necesidades específicas de su familia, ante una eventualidad. A continuación, tiene una lista de los suministros principales.
Agua – al menos 1 galón por persona por día durante 3 a 7 días
Comida suficiente entre 3 y 7 días
Botiquín de primeros auxilios / Medicamentos
Artículos especiales para niños y ancianos
Linterna / Baterías
Una radio portátil con acceso a la estación meteorológica de la NOAA
Documentos importantes en un sitio seguro
Los tanques llenos de combustible de vehículos
Artículos para el cuidado de mascotas
Amanda Ron / El Venezolano / Foto: Archivo