Enrique Peña Nieto trasladó este mensaje al ministro español de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, en la reunión mantenida en su residencia presidencial de Los Pinos a su llegada a Ciudad de México en visita oficial.
“Me ha reiterado que prefiere hacer estas cosas de manera paciente y cauta y que observa que ya ha habido un cambio de actitud”, señaló Dastis a los periodistas tras la cita con Enrique Peña Nieto.
El ministro de Exteriores manifestó al mandatario mexicano que España “está a la orden” de lo que le plantee.
No obstante, admitió que “la mejor manera de actuar” era seguir el deseo de México de optar por “una actitud inequívoca de apoyo, pero sin grandes manifestaciones que pudieran añadir leña al fuego o interpretarse como una intromisión” en la que España “no quiere caer”.
“Las disensiones, las controversias, las tensiones se resuelven hablando entre dos países que forman parte de una alianza de cultura y de valores que no tiene por qué romperse, independientemente de que haya un cambio en la jefatura de Estado de uno u otro”, sostuvo Dastis.
Según el ministro, el respaldo a México no tiene por qué hacer que se enturbie la relación de España con Estados Unidos.
Aseguró que el Gobierno de Trump es “consciente” de los lazos históricos, culturales y de sangre entre España y México: “No estamos haciendo nada que pueda llamar la atención”.
“Hacemos votos para que se reconozca que la relación entre Estados Unidos y México, dos grandes países amigos, vecinos, con los que el entramado de relaciones es tan estrecho, que eso sea algo que vaya cayendo por su propio peso”, confió.
En caso de que fuese necesario “adaptar, ajustar o modernizar” ese vínculo entre México y Estados Unidos, añadió Dastis, “se pueda hacer hablando y tratando de tener en cuenta los intereses de ambos.
Se refirió al caso concreto del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que Trump ha puesto en tela de juicio su continuidad.
Dastis se inclinó por “no especular” si la asociación comercial de Estados Unidos con México y Canadá “se va a mantener”, si bien cree, por lo que le dijo Enrique Peña Nieto, que seguirá adelante.
España, el segundo inversor extranjero en México por detrás de Estados Unidos, cuenta con 5.800 empresas en el país centroamericano.
Aunque el TLCAN se modificara, Dastis opinó que no afectará a las empresas españolas porque “la mayoría de ellas están orientadas al mercado mexicano”.
En su primera visita a México desde que tomó las riendas de la diplomacia española el pasado mes de noviembre, Dastis coincidió con Enrique Peña Nieto en la “estrechez” de la relación bilateral, de la que este año se cumple el 40 aniversario.
Con este motivo, el próximo 20 de abril se celebrará la Comisión Binacional, el marco donde se desarrolla el diálogo político entre ambos Gobiernos.
Dastis remarcó “la deuda de gratitud” que España tiene con México y manifestó su deseo de “reforzar aún más los lazos” en el futuro.
La reunión con Enrique Peña Nieto se prolongó durante unos 45 minutos y en ella también estuvo presente el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, con quien Dastis mantendrá mañana un encuentro de trabajo antes de regresar a Madrid.
Desde Los Pinos, Dastis se trasladó a la residencia del embajador de España en México, Luis Fernández-Cid, para mantener un almuerzo con diversas personalidades mexicanas vinculadas con España.
Su agenda va a continuar con un encuentro con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, para intercambiar impresiones sobre el impacto comercial de los planes de Trump y las relaciones empresariales entre ambos países.
Su primera jornada se completará con un acto en el Centro Cultural de España junto con la secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda, para presentar un libro sobre la labor desarrollada por esta entidad en los últimos 15 años.
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