“Bueno, si usted mira a algunas personas relacionadas con Hillary Clinton durante su campaña, probablemente verá que tuvo muchas reuniones de ese tipo”, dijo Peskov en una entrevista con la cadena CNN.
“Hay muchos especialistas en politología, personas que trabajan en “Think Tanks” asesorando a Hillary o para asesorar a personas que trabajan para Hillary”, aseguró el portavoz, en relación a las reuniones que Kislyak había mantenido con el ahora fiscal general, Jeff Sessions, y que este ocultó en sus audiencias de confirmación en el Senado.
Peskov aseguró que es tarea del embajador ruso reunirse con funcionarios de ambas partes para hablar de las “relaciones bilaterales” y defendió esas reuniones, diciendo que no eran un intento de interferir en las elecciones de 2016.
“Pero no hubo reuniones sobre las elecciones, sobre el proceso electoral. Así que, si lo mira con intención de demonizar a Rusia, probablemente diría que, sí, estaba tratando de interferir en las actividades de Hillary. Pero sería absurdo, porque esto no es cierto”, dijo Peskov.
Peskov también dijo que Putin nunca expresó su apoyo al entonces candidato presidencial Trump, aunque reconoció que prefería su victoria frente a la de la ex secretaria de Estado.
“Usted probablemente recordará que el presidente Putin, durante la campaña electoral, nunca respondió directamente al ser preguntado sobre a qué candidato daba su apoyo. Seguía diciendo que respetaríamos la elección del pueblo estadounidense”, afirmó el portavoz.
Peskov sugirió que Putin encontró a Clinton hostil hacia Rusia, mientras que Trump estaba abierto a descongelar las relaciones entre Estados Unidos y el Kremlin.
“La candidata Hillary Clinton fue muy negativa sobre nuestro país en su actitud y en su programa, declarando que Rusia es casi el principal mal del mundo y la principal amenaza para Estados Unidos”, dijo Peskov.
“Y, al contrario, el otro candidato, Donald Trump, estaba diciendo que ‘Sí, estamos en desacuerdo con los rusos … en muchos asuntos, pero tenemos que hablar con ellos para intentar encontrar algo de entendimiento’. ¿Quién le gustaría más? El que dice que Rusia es malo o el que dice eso, ‘Sí, no estamos de acuerdo, ¿pero vamos a hablar para entender y tratar de encontrar algunos puntos de acuerdo?'”, se preguntó.
El Gobierno de Trump es objeto de escrutinio ante las alegaciones de la inteligencia de Estados Unidos de que el Gobierno ruso interfirió en los resultados electorales de noviembre y la revelación de que algunos de sus miembros, entonces asesores de campaña, mantuvieron reuniones secretas con funcionarios rusos.
Los demócratas, y algunos republicanos, están presionando para que se abra una investigación independiente sobre el asunto, aunque de momento está siendo procesada por la vía convencional, y en el Congreso se han convocado audiencias al respecto, pero ningún comité especial.
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