Este miércoles el presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó que su país no apoyará las nuevas sanciones contra Siria, ya que su adopción no ayudaría al proceso negociados para el logro de un arreglo pacífico al conflicto en el país árabe.
“Rusia no respaldará ninguna nueva sanción contra Siria”, dijo durante una rueda de prensa el jefe del Kremlin, luego de mantener una conversación con el presidente de Kirguizistán, Almazbek Atambáyev.
El Consejo de Seguridad de la ONU votará este miércoles por un proyecto de resolución que impone severas sanciones a Siria por el uso de armas químicas, y que Moscú ya había indicado que vetaría.
La resolución contra el régimen de Bachar al Asad, que está en discusión desde hace varios meses, ha sido promovida por Estados Unidos, Francia y el Reino Unido, tres de los cinco países miembros permanentes del Consejo, entre los que se cuentan también Rusia y China.
Putin calificó la iniciativa de “completamente inoportuna” y aseguró que la adopción de sanciones “no ayudaría al proceso negociador, y solo sería un estorbo o socavaría la confianza en las negociaciones”.
Una investigación conjunta de la ONU y la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) determinó que el régimen de Al Asad estuvo detrás de varios ataques con sustancias prohibidas en 2014 y 2015.
Sin embargo, Rusia, el principal aliado del Gobierno de Damasco, ha cuestionado repetidamente la objetividad y el trabajo desarrollado por los expertos que se ocuparon del caso.
Iveth Villalobos / EV Houston / EFE / Foto: EFE