“El hijo de tres años de un secretario judicial falleció. Hay 15 heridos leves que están siendo atendidos en el hospital”, escribió la agencia oficial Anadolu, citando al gobernador Güngor Azim Tuna, quien calificó la explosión de “atentado terrorista”.
Azim confirmó que la explosión tuvo lugar a las 10:45 am (hora Houston). Horas más tarde, el ministro del Interior de Turquía, Süleyman Soylu, reafirmó que el balance era de una víctima mortal (un niño) y unos 15 heridos leves.
Por otro lado, insinuó que detrás del ataque posiblemente se encuentra el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda.
“No se preocupen: cumpliremos con nuestra palabra hasta el final y el PKK será borrado de las tierras de este país”, prometió el ministro, tras dar el pésame por el niño fallecido.
Viransehir, es una ciudad situada a unos 80 kilómetros al este de la capital provincial, se ubica a tan sólo 20 kilómetros de la provincia vecina de Mardin, escenario habitual de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y el PKK.
La explosión en Turquía se registró frente a un complejo de viviendas para empleados judiciales.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: Twitter
