La justicia local indicó que “está demostrado que es necesario detener [a Lee Jae-Yong], a la luz de una nueva acusación y de nuevas pruebas”.
Un portavoz judicial expresó que Lee ya se encontraba en un centro de detención tras comparecer ante el tribunal el jueves, a la espera de que los jueces decidieran si era o no necesario emitir orden de arresto contra él.
Lee, de 48 años, es acusado de haber pagado cerca de 40 millones de dólares en sobornos a la confidente de Park para lograr favores políticos.
El mes pasado, Lee se libró de ser detenido después de que un tribunal dictaminara que no había suficientes pruebas en su contra.
Sin embargo, los fiscales volvieron a pedir su arresto el martes, asegurando que habían encontrado nuevas evidencias en las últimas semanas.
Su detención, la primera de un responsable de Samsung, podría afectar a todo el conglomerado, el cual representa una quinta parte de la economía surcoreana e incluye al primer fabricante mundial de teléfonos inteligentes, Samsung Electronics.
Todo esto se da cuando el grupo se está recuperando del duro revés que sufrió con la retirada de su modelo estrella, el Samsung Galaxy Note 7, por un problema con la batería de algunos teléfonos que llegaron a incendiarse.
El escándalo de corrupción gira en torno a Choi Soon-Sil, confidente de Park Geun-Hye, quien está siendo juzgada por haber utilizado su relación con la presidenta destituida para obligar a grandes conglomerados a pagar millones de dólares a sus dos fundaciones privadas caritativas, pero dichos fondos eran aprovechados a título personal.
Samsung fue el más generoso de esos conglomerados, donando 20.000 millones de wones (17 millones de dólares) a las fundaciones de Choi. El pago era, supuestamente, a cambio de que el Gobierno respaldara una fusión de dos filiales de Samsung.
Desde que estalló el caso, más de una decena de personas han sido arrestadas, entre ellas, Choi, los exministros de Cultura y de Asuntos Sociales, un exdirector del gabinete presidencial y un profesor de universidad.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE