Sean Spicer, el nuevo portavoz de la Casa Blanca, convocó una rueda de prensa para su primera conferencia, donde se esperaba que formulara algún tipo de comentario sobre las marchas contra el magnate republicano, las cuales han movilizado a más de dos millones de personas en todo EE.UU.
Sin embargo, Spicer no solo no aceptó preguntas, sino que además consideró que la cobertura de la ceremonia de investidura realizada el viernes fue “irresponsable” por sugerir que habían asistido pocas personas.
Según Spicer, “algunos miembros de la prensa deliberadamente reportaron informaciones falsas”.
Uno de los ejemplos mencionados por el portavoz fue el de una polémica en Twitter por la supuesta retirada de un busto de Martin Luther King del Salón Oval y la divulgación de imágenes de la ceremonia de investidura que sugería que había muy poca gente acompañando a Trump durante su juramentación.
Spicer recordó que dos miembros del gabinete de Trump ya fueron confirmados por el Senado, por lo que amonestó a la prensa por la cobertura.
“Es sobre eso que ustedes deberían estar escribiendo, en vez de sembrar la división sobre tuits y falsa narrativa (…) Fue la mayor audiencia que alguna vez acompañó una investidura. ¡Punto!”, dijo Spicer con un tono que no parecía dejar lugar a dudas.
Por otra parte, Spicer resaltó que el nuevo gobierno entiende que la prensa espera que el presidente rinda cuentas, pero “Nosotros haremos que la prensa rinda cuentas, también”, señaló.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE