La estatua del presidente electo, se puede apreciar con expresión adusta en el rostro, vestimenta azul marino, con camisa blanca y corbata roja; y la misma ya preside la reconstrucción del Salón Oval de la Casa Blanca del popular museo londinense.
La figura de cera lleva como el real una escarapela con la bandera de Estados Unidos en la solapa.
Según los especialistas del Tussauds, a la estatua se le implanto pelos de yak tibetano, los cuales fueron cuidadosamente peinados con fijador, lo que le da más realismo y permiten que se parezca aún más al multimillonario.
“Desde que Trump fue declarado candidato vencedor tras una campaña despiadada de ambos lados, nuestro estudio estuvo obrando sin respiro para intentar reproducir su llamativo bronceado y peculiar cabellera, a tiempo para el inicio de su mandato presidencial”, dijo el director del museo Edward Fuller.
La reproducción de Trump quedará expuesta al público a partir del viernes y permanecerá en el museo el tiempo que dure su presidencia.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE