
Las declaraciones de Michelle Obama fueron dadas en la ciudad de Phoenix, Arizona, un estado que tradicionalmente es republicano. Sin embargo, esta no se cohibió de criticar lo dicho por el magnate en el debate del miércoles, cuando Trump indicó que dejaría “en suspenso” la respuesta de si aceptaría o no el resultado de las elecciones.
“No puedes intentar mantener en suspenso la democracia estadounidense. Demasiada gente ha luchado y se ha manifestado y ha muerto por esta democracia”, afirmó en un apasionado discurso Michelle Obama.
La esposa del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se sumó de esta forma a las críticas realizadas por su esposo poco antes, y quien expresó que la actitud del neoyorquino es “peligrosa” y “mina la democracia” de los estadounidenses.
Michelle Obama advirtió a los asistentes de su mitin que quienes “hablan de que las elecciones están amañadas”, como ha hecho Trump, “están tratando de convencerlos de que se queden en casa, están intentando quitarles su voto”.
“Nuestra democracia es reverenciada en todo el mundo (…). Somos lo suficientemente afortunados de vivir en un lugar donde los ciudadanos deciden quién es presidente”, defendió la primera dama.
“No podemos dejar que silencien nuestras voces, porque cada voto cuenta”, aseguró Obama.
La primera dama pidió a “republicanos, demócratas e independientes” que hagan todo lo posible para que la candidata demócrata, Hillary Clinton, repita la hazaña de su esposo Bill Clinton en las elecciones de 1996, el único aspirante presidencial de su partido que ha ganado Arizona desde 1952.
Las encuestas en ese estado del suroeste del país están ajustadas y Clinton tiene opciones de ganarlo, lo que motivó el acto de campaña de Michelle Obama allí.
Iveth Villalobos / EV Houston / EFE / Foto: EFE