Este domingo 20 de mayo, día que se realizan las votaciones en Venezuela para elegir un nuevo presidente, se ha registrado una baja afluencia de electores.
El Colegio la Concepción, uno de los más grandes de Caracas con 14 mesas instaladas, se encuentra vacío y dicho escenario de desolación se repite en el interior del país.
Se estima que mitad de los venezolanos no acudirán a las urnas, al considerar estas elecciones como fraudelentas y tras el llamado a no votar de los líderes opositores, que en su mayoría se encuentran privados de libertad o inhabilitados. Es decir, que quien resulte electo, según las estimaciones más favorecedoras, tendrá el respaldo de una cuarta parte de la población.
De igual forma, la comunidad internacional ha expresado que no reconocerán los resultados de estas elecciones, pues el Consejo Nacional Electoral (CNE) carece de transparencia.
Maduro se enfrenta principalmente al exgobernador del estado Lara, Henri Falcón, y al expastor evángelico Javier Bertucci. Es importante resaltar que un nuevo triunfo del chavismo podría desatar sanciones petroleras de Estados Unidos y una nueva condena de países vecinos y de Europa.
Además, en estas votaciones se elegirán a los representantes de los consejos legislativos de los 23 estados del país, y aunque la mayoría está gobernado por el chavismo, la decisión de no participar de los opositores dará a los oficialistas el control de casi el total de órganos de contraloría.
EV Houston/Agencias / foto: REUTERS/Carlos Jasso