Si el gobierno estadounidense “nos arrincona y nos pide unilateralmente abandonar nuestras armas nucleares no vamos a tener ningún interés en las conversaciones y vamos a tener que reconsiderar si aceptamos la futura cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos”, así lo dio a conocer el viceministro de Relaciones Exteriores Kim Kye Gwan a través de un comunicado difundido por la agencia oficial KCNA.
El funcionario norcoreano criticó los recientes comentarios del principal asesor de seguridad de Trump, John Bolton, y de otros cargos estadounidenses que apuntaron que el Norte debería seguir el “modelo libio” de desarme nuclear y proporcionar un “desmantelamiento completo, verificable e irreversible”. También discrepó con la idea estadounidense de que su país debe entregar sus armas biológicas y químicas.
Según diversos analistas mencionar a Libia, que desmanteló su rudimentario programa nuclear en la década de los 2000 a cambio del levantamiento de las sanciones en su contra, pone en peligro las negociaciones con Pyongyang. Kim Jong Un heredó el mando del país semanas después de la muerte del exlíder libio Moamar Gadafi a manos de las fuerzas rebeldes durante un levantamiento popular en octubre de 2011. El país apeló en varias ocasiones a la muerte de Gadafi para justificar su programa nuclear frente a lo que percibe como amenazas de Estados Unidos.
En la cumbre con el presidente surcoreano Moon Jae-in el mes pasado Moon Jae-in reafirmó su compromiso con una desnuclearización de la península de Corea.
Iveth Villalobos / EV Houston Newspaper / AFP / Reuters / Foto: EFE / AFP