Las protestas iniciadas por estudiantes el 18 de abril, y que se extendieron a otros sectores, contra una reforma al sistema de pensiones que dejo unos 45 muertos y 400 heridos en todo el país, así lo indicó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) un organismo independiente.
La comisión de la verdad, que ha sido cuestionada antes de su juramentación por opositores al gobierno y organismos independientes de derechos humanos, deberá presentar un reporte de su investigación en tres meses, dijo el presidente del Parlamento, el oficialista Gustavo Porras, durante la sesión plenaria de 20 minutos.
Los integrantes de la comisión son “notables nicaragüenses de diferentes sectores que están de acuerdo con el diálogo y paz”, expresó Porras, cercano al mandatario.
Los miembros de la comisión son el economista Cairo Amador, la ex rectora de Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaragüense (URACCAN), Mirna Cunninhgam, el vicepresidente del Consejo Nacional de Universidades (CNU) Jairo López, el sacerdote Uriel Molina y uno de los miembros de la estatal Procuraduría de Derechos Humanos, Adolfo Jarquin.
Estudiantes, empresarios y la iglesia Católica reclaman una investigación independiente que cuente con la participación de organismos internacionales -como la CIDH- para determinar la responsabilidad por las muertes y heridos durante las protestas.
Pero el gobierno rechazó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) visite el país para evaluar la situación en el terreno y pidió al organismo esperar los resultados de un diálogo nacional que contará con la mediación de la iglesia Católica, a pedido de Ortega.
Iveth Villalobos / EV Houston Newspaper / El Comercio Perú / Foto: AFP