Esta línea conecta la Casa Azul de la presidencia surcoreana en Seúl, con la oficina en Pyongyang de la Comisión de Asuntos de Estados, presidida por el dirigente norcoreano.
“La conexión histórica entre los dirigentes de las dos Coreas acaba de establecerse”, declaró Yoon Kun-young, un alto cargo de la Casa Azul. Hubo una conversación de prueba entre funcionarios de las dos partes que duró cuatro minutos y 19 segundos.
“La conexión es buena. Es como hablar con un vecino”, agregó.
La península coreana está dividida desde hace 70 años. Desde el fin de la guerra (1950-1953) no se permite ninguna comunicación telefónica o postal entre los ciudadanos de ambos países.
Esta línea, que permitirá a Kim y Moon hablarse directamente, es el último paso que ilustra el acercamiento diplomático entre los dos vecinos desde los Juegos Olímpicos de invierno organizados en el Sur.
Los dirigentes de las dos Coreas se reunirán el próximo viernes del lado sur de la zona desmilitarizada. Será la tercera cumbre entre los dos países desde el fin de la guerra.
Iveth Villalobos / EV Houston Newspaper / AFP / Foto: AFP