El rey de España, Felipe VI, el presidente de EE.UU, Barack Obama, y otros líderes mundiales pusieron fin a primera hora de la tarde a su visita a Israel para participar en el funeral de Estado del fallecido presidente y premio Nobel de la Paz Simón Peres.
Felipe VI, acompañado del ministro de Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, y una delegación de una veintena de personas, abandonaron el país en el avión oficial con el que llegaron a la última hora de anoche, confirmaron a Efe fuentes diplomáticas españolas.
Poco antes, despegaba del mismo aeropuerto de Ben Gurión el avión presidencial estadounidense Air Force One, que trasladaba a buena parte de la delegación encabezada por Obama y compuesta por más de treinta altos cargos, incluidos el secretario de Estado, John Kerry, la líder demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y decenas de senadores y congresistas.
El presidente estadounidense ha sido el único gobernante, junto a Bill Clinton, en participar con un discurso en la ceremonia de despedida de Peres, que se celebró a media mañana en el monte Herzl de Jerusalén.
En las próximas horas se espera que abandonen Israel la mayor parte de las noventa delegaciones de setenta países que llegaron en las últimas horas para participar en las exequias, incluidos 24 jefes de estado y diez jefes de gobierno.
Además, estuvieron también presentes los presidentes de México, Enrique Peña Nieto; Alemania, Joachim Gauck; Francia, François Hollande; el príncipe Carlos de Inglaterra y el gran duque Enrique de Luxemburgo.
La gran concentración de gobernantes de todo el mundo obligó a reforzar las medidas de seguridad y la Policía desplegó un gran número de agentes y organizó un plan que incluyó el cierre del tráfico durante la mañana en las vías de acceso al monte Herzl y en la principal carretera del país, que une Jerusalén con Tel Aviv.
Felipe VI, acompañado del ministro de Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, y una delegación de una veintena de personas, abandonaron el país en el avión oficial con el que llegaron a la última hora de anoche, confirmaron a Efe fuentes diplomáticas españolas.
Poco antes, despegaba del mismo aeropuerto de Ben Gurión el avión presidencial estadounidense Air Force One, que trasladaba a buena parte de la delegación encabezada por Obama y compuesta por más de treinta altos cargos, incluidos el secretario de Estado, John Kerry, la líder demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y decenas de senadores y congresistas.
El presidente estadounidense ha sido el único gobernante, junto a Bill Clinton, en participar con un discurso en la ceremonia de despedida de Peres, que se celebró a media mañana en el monte Herzl de Jerusalén.
En las próximas horas se espera que abandonen Israel la mayor parte de las noventa delegaciones de setenta países que llegaron en las últimas horas para participar en las exequias, incluidos 24 jefes de estado y diez jefes de gobierno.
Además, estuvieron también presentes los presidentes de México, Enrique Peña Nieto; Alemania, Joachim Gauck; Francia, François Hollande; el príncipe Carlos de Inglaterra y el gran duque Enrique de Luxemburgo.
La gran concentración de gobernantes de todo el mundo obligó a reforzar las medidas de seguridad y la Policía desplegó un gran número de agentes y organizó un plan que incluyó el cierre del tráfico durante la mañana en las vías de acceso al monte Herzl y en la principal carretera del país, que une Jerusalén con Tel Aviv.
EFE / Foto: EFE